En el marco del segundo día de movilizaciones de los trabajadores de dos de los sindicatos de Express de Santiago Uno, la empresa informó que más de 500 máquinas han resultado con daños producto de acciones vandálicas.
Además, dos buses fueron completamente quemados, uno de Alsacia y otro de Express, tras el ataque de personas encapuchadas. Los trabajadores movilizados descartaron algún tipo de participación en esos hechos.
En tanto, personal de Fuerzas Especiales de Carabineros logró desbloquear algunos de los terminales ocupados por los huelguistas. La policía uniformada ha prestado colaboración con la empresa para resguardar la salida de los buses de manera de asegurar que cumplan con sus recorridos habituales.
“Estos actos vandálicos son absolutamente reprochables y los rechazamos categóricamente, ya que ponen en riesgo la seguridad a los conductores que sí quieren trabajar y perjudica a los miles de pasajeros que necesitan desplazarse en Santiago”, señaló la gerente de Asuntos Públicos de Express de Santiago Uno, Claudia Brandes.
Durante la hora punta de la mañana los recorridos han presentado retrasos y la oferta de buses se ha visto “significativamente impactada”, según afirmó la empresa.
“El transporte público es un servicio crítico necesario para el desarrollo normal de la ciudad y su economía, por lo tanto es fundamental asegurar esta actividad”, explicó Claudia Brandes.
La evaluación de las autoridades de Gobierno es que el impacto en el transporte público de la huelga no impidió que el sistema operara en un 95%.
Igualmente la empresa, que está en coordinación con la autoridad de transporte desplegando el plan de contingencia operacional, llamó a los usuarios a organizarse con tiempo de manera de evitar inconvenientes en sus traslados.
