La investigación por la muerte de tres trabajadores de la siderúrgica Huachipato, ocurrido el año 2008, concluyó con un acuerdo reparatorio por 550 millones de pesos para los familiares de los fallecidos.

La tragedia ocurrió el 17 de diciembre del año 2008 en la estación de desgasificación al vacío de la siderúrgica Huachipato, en medio de las faenas de limpieza de fosos.

Las víctimas inhalaron gas argón y el primero en caer fue Pablo Mendoza Hidalgo, quien entró al foso para extraer un trozo de escoria, pero cayó desvanecido debido a la insuficiencia de oxígeno.

Mismo destino corrieron Jaime Sandoval Vergara, contratista de la empresa de servicios Mehuen; y Francisco Nocetti de la Barra, paramédico del policlínico de Huachipato, quienes fueron a ayudar a Mendoza.

El acuerdo reparatorio es una salida alternativa al juicio oral por los tres cuasi delito de homicidio, de lo que fueron imputados cinco funcionarios de la siderúrgica, quienes, por acción u omisión, cometieron actos negligentes de los que son imputables, comentó el fiscal adjunto Julián Muñoz.

El acuerdo reparatorio por 550 millones de pesos para los familiares de las víctimas fue aprobado por el juzgado de garantía de Talcahuano.

Se estableció que Esteban Alvez superintendente de acerías y colada continua; y Rodrigo Espinoza, jefe de la sección, no instruyeron a los trabajadores sobre el riesgo asociado a la acumulación y emanación de gas argón.

Francisco Sáez, ingeniero en prevención de riesgos, no previó el peligro asociado a las faenas, mientras Juan Martínez, gerente de medio ambiente, y Roberto Bancallari, jefe de seguridad, no diseñaron ni propusieron un programa de capacitación en materia de seguridad.