En suspenso quedó el resultado de la audiencia de tres reclamaciones presentadas contra el dictamen de la Superintendencia del Medio Ambiente, SMA, que paralizó el proyecto aurífero Pascua Lama y aplicó una multa por 12 mil Unidades Tributarias Anuales, casi 6 mil millones de pesos.

Sebastián Avilés, abogado de la Superintendencia del Medio Ambiente, negó que haya existido afectación de aguas y defendió las penas aplicadas por la SMA, afirmando que cumplen con el ordenamiento jurídico de nuestro país.

José Antonio Urrutia, abogado de Barrick Gold, argumentó, ante el Segundo Tribunal Ambiental de Santiago, que el único organismo capacitado para aplicar sanciones es la SMA.

Además agregó que no se dan las condiciones legales como para revocar la Resolución de Calificación Ambiental (RCA), porque a su juicio “no ha existido daño ambiental, contaminación ni afectación de la calidad de las aguas”.

Postura distinta a la manifestada por Álvaro Toro, representante de 37 agricultores de la zona, quien indicó que los ríos Estrecho y Huasco y las napas subterráneas ya han sido contaminadas y que el responsable es Barrick.

El abogado negó que las sanciones aplicadas por la SMA sean proporcionales a este daño, por lo que exigió la revocación de la RCA de Pascua Lama.

El fallo del Segundo Tribunal Ambiental de Santiago quedó en “estudio”, es decir, los tres magistrados analizarán los argumentos enunciados en la audiencia y los documentos que se acompañaron en cada intervención, por lo que la sentencia no se conocería antes de un mes.