Usualmente, hombres y mujeres albergan diversas prendas de vestir y accesorios en su clóset, los cuales incluyen algunos pares de jeans, corbatas, aros y tacones altos. No obstante ¿Sabías que estos artículos suponen un riesgo para tu salud?

Según informó CNN en Español, en ciertas ocasiones dichos productos pueden provocar enfermedades y malestares que abarcan desde dolores de cabeza hasta problemas de circulación.

1.- Las camisas y corbatas.

Según una investigación de la Universidad de Cornell (EEUU), el 67% de los hombres compra camisas que son más pequeñas que sus cuellos. Esta situación, pese a lo que pueda pensarse, supone un gran riesgo para la salud de los hombres.

Lo anterior ya que usar esta prenda de forma estrecha, o también corbatas muy apretadas, puede reducir la circulación de la sangre al cerebro, causar dolores de cabeza, aumentar la tensión muscular de la espalda y hombros, aumentar la presión intraocular y limitar el movimiento del cuello.

Además, si una corbata no se lava correctamente se convierte en una posible fuente de bacterias que transmiten infecciones.

2.- Los tacones altos.

De acuerdo a un reciente estudio de la Universidad de Auburn (EEUU), las mujeres padecen hasta 4 veces más problemas en los pies que los hombres, principalmente, debido al uso de tacones. Lo negativo, de acuerdo a la publicación, es que la situación empeora cuanto más alto y estrecho es el zapato.

Al respecto, se detalló que las dolencias relacionadas con esta acción incluyen problemas en el tendón de Aquiles, callos, juanetes, dedos en forma de martillo, dolor en la rodilla y cadera, esguinces de tobillo e incluso daños en los nervios.

Asimismo, cabe indicar que el uso de tacones de gran altura podría propiciar la osteoarthritis, es decir, el desgaste del cartílago que existe en las articulaciones y que evita que los huesos rocen unos con otros.

Por último, para evitar estos riesgos, los expertos recomiendan limitar el uso de tacones y hallar un par de zapatos más cómodos y con mejor soporte, sobre todo, cuando se recorren largas distancias.

3.- Los jeans ajustados.

En la actualidad, a un gran número de mujeres les gusta utilizar cinturones o pantalones extremadamente ajustados. Sin embargo, lo que muchas de ellas no saben es que usar prendas muy ceñidas al cuerpo puede generar graves daños en su organismo, debido a su acción “compresora”.

Específicamente, los jeans ajustados y otras prendas que hagan presión pueden provocar problemas digestivos y de circulación, además de adormecimiento de las piernas.

Incluso, se ha dicho que los “pitillos” o “skinny jeans” podrían comprimir el nervio cutáneo femoral lateral y, con ello, favorecer la aparición de una meralgia parestésica; condición que provoca el entumecimiento y dolor de los muslos.

Tan común es esta dolencia, que el médico Octavio Bessa de Stamford (Connecticut, Estados Unidos) acuñó el término “Síndrome de los Pantalones Apretados” para diagnosticar a aquellos pacientes que llegan con dolores abdominales, ardor de estómago y dilatación de las venas producto de la ropa ajustada.

4.- Los aros.

Según un estudio efectuado por dermatólogos de la Universidad de Northwestern (EEUU), el 20% de las perforaciones o “piercings” desarrollan infecciones bacteriales.

En este contexto, CNN informó que además una mala elección del sitio o la manera en que se realizan las perforaciones puede producir un contagio de infecciones locales o sistémicas, las cuales producen serios problemas de salud.

Entre dichas amenazas se encuentran la hepatitis viral de tipo B y C, el tétano y las reacciones alérgicas o tóxicas, entre otras.

Finalmente, el uso frecuente de aros grandes y pesados incluso podría generar el desgarro del lóbulo de la oreja; problema que en ocasiones requiere de cirugía plástica para ser corregido.