El lanzamiento oficial de la candidatura presidencial del economista Franco Parisi, vino a ratificar el ascenso de una figura mediática poco tradicional en nuestra política. Su perfil “técnico” y su lejanía con los conglomerados partidistas, ha llamado la atención de la ciudadanía, especialmente en redes sociales.

Pese a su crítica permanente a la política, el ingeniero comercial de la Universidad de Chile tiene un pasado vinculado al aparato estatal, registrando pasos como asesor del Ministerio de Educación y de Obras Públicas. Además, fue miembro del Grupo de Política Monetaria y actualmente aparece como consejero de la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco).

Aunque el propio Parisi señaló en su cuenta en la red social Twitter, que no es parte de este organismo estatal.

Pese a lo anterior, su figura se hizo conocida especialmente gracias al escándalo en la multitienda La Polar, en donde fue permanentemente consultado por los medios de comunicación.

Aunque también ha escogido medios alternativos para posicionarse como figura pública, especialmente a través de redes sociales, charlas en universidades, y participación en programas de TV que si bien no tienen alta sintonía, tienen un público estable definido, como es el caso de “Morandé con Compañía”.

Su lenguaje simple y directo, cercano a la gente común y corriente, se vio refrendado en la participación activa en el conflicto de Aysén, donde apareció junto a Iván Fuentes, como asesor de los movilizados, ratificando su mote de el “economista del pueblo”.

Esta figuración vino a confirmar en cierta medida, su sorpresiva irrupción en una encuesta de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo con un 3% de las preferencias en una eventual elección presidencial.

Ya catapultado en la arena política, el menor de los hermanos Parisi se ha dedicado a reiterar sus críticas en contra del sistema político, asegurando que en nuestro país el sistema binominal es un “monopolio”, agregando que la ciudadanía ya está cansada del pago de favores políticos y eso ha llevado a los gobernantes a perder credibilidad con la gente.

Su estilo poco tradicional, provocaron las comparaciones con Marco Enríquez-Ominami, con quien incluso pretendió competir en una elección primaria, lo que no se concretó debido a la negativa del presidente del PRO, según acusó Parisi.

Sin embargo, y ante su arremetida, no tardaron en aparecer mayores antecedentes acerca de su vida privada, como por ejemplo sus vínculos con la Gran Logia Masónica de Chile.

Franco y su hermano Antonino tienen un fondo de inversión llamado “Palermo”, bajo cuya administración acogieron los colegios La Fontaine y Las Américas, de Ñuñoa y La Reina, pero la iniciativa no prosperó y finalmente la institución masónica decidió poner fin al arrendamiento de las acciones (70%) que gestionaban.

Luego del traspié, el mayor de los Parisi salió a defender al ex decano de la Facultad de Economía de la Universidad de Chile, atribuyéndose la responsabilidad de lo sucedido, asegurando que “este es un emprendimiento mío, no de mi hermano”, según consignó La Tercera.

Entre las situaciones que derivaron en el fracaso, se cuentan cotizaciones y sueldos impagos de profesores y funcionarios, en medio de acusaciones cruzadas con dirigentes del sindicato de trabajadores.

Si bien la idea era consolidar la plataforma online del sistema “Escuela Sin Fronteras” del Mineduc, finalmente los Parisi debieron abandonar el emprendimiento, acusando una operación política, de acuerdo a declaraciones publicadas en El Mostrador.

“Todo esto viene desde la gente de MEO, según pude ver en twitter, porque Franco marca el 12% en las encuestas y MEO el 10%”, señaló Antonino.

Conspiración o no, lo cierto es que con la oficialización de la candidatura de Parisi, nuevamente ambos candidatos “poco tradicionales” volverán a verse las caras en noviembre de 2013, para intentar ocupar el sillón que actualmente ocupa Sebastián Piñera.