El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, confirmó durante una alocución especial al país este domingo que, tras casi una década de búsqueda, el fundador del grupo terrorista Al Qaeda finalmente fue muerto por fuerzas militares estadounidenses.

En un discurso de escasos minutos y donde no se aceptó preguntas, el Mandatario informó que tras un largo trabajo de inteligencia se logró establecer la ubicación del líder fundamentalista en una residencia de las afueras de Abbottabad, en Pakistán.

Posteriormente, se envió una pequeña fuerza de efectivos militares, quienes dispararon contra los ocupantes del lugar logrando la muerte de 5 personas, entre ellas Bin Laden, así como la captura de su cadáver. Durante el ataque no se produjeron bajas estadounidenses.

Obama afirmó que “en noches como esta, podemos decir que se hizo justicia”, además de destacar que sólo fue posible gracias a la colaboración con el servicio de inteligencia pakistaní.

Más temprano, un oficial estadounidense en condición de anonimato había adelantado la noticia a los medios de comunicación, agregando que otros cercanos a Bin Laden habrían muerto también en la operación, sin embargo no se especificó si el segundo al mando de la organización terrorista, Ayman al-Zawahiri, estaba entre ellos.

El hecho ocurre casi 10 años después de los atentados a las Torres Gemelas en Nueva York, un 11 de septiembre de 2001, donde murieron casi 3000 personas.

Precisamente, las últimas palabras de Obama antes de cerrar su anuncio, fue para los familiares de las víctimas de los atentados.

“Nunca hemos olvidado sus pérdidas. El logro de hoy es el testimonio de la grandeza de nuestro país y de la determinación del pueblo estadounidense”.