Tras finalizar un matrimonio o relación larga, es difícil retomar la vida sexual, pero no imposible.

La experta en sexualidad y directora del Centro Miintimidad, Odette Freundlich, admite que las que más sufren son las mujeres que han tenido un largo tiempo de matrimonio, sin una pareja anterior más que su marido, generalmente con edades sobre los 50 años.

“Tras un proceso de separación matrimonial surgen muchas inseguridades tales como: ¿rendiré bien en la intimidad con esta nueva persona?, ¿cómo estarán mis genitales para la ocasión?, ¿estará muy suelta mi vagina?, ¿sentiré placer en las relaciones?, ¿lograré tener un orgasmo?”, detalla la especialista en sexualidad.

“Por la ansiedad, puede ocurrir que se dará poco tiempo para el primer encuentro íntimo y tal vez la mujer no tendrá la lubricación suficiente y se experimentará dolor en la penetración o Dispareunia durante la relación sexual, o eventualmente no alcanzará el orgasmo”, afirma Freundlich.

“En el caso de los hombres, por efectos de la ansiedad, pueden tener una eyaculación antes de lo deseado, y es factible que la erección no sea la mejor en los primeros encuentros, por los nervios que se tienen”, cuenta la directora del Centro Miintimidad.

En ese sentido, la especialista en disfunciones del suelo pelviano apunta que, si las situaciones antes descritas suceden una vez, no son de preocupación, pero si se mantienen en el tiempo, es relevante consultar con un experto que investigue las razones y encuentre las soluciones técnicas para que la vida sexual sea plena con la pareja.

Recomendaciones

Con todo, para “la nueva primera vez”, Freundlich hace un llamado a no temer al encuentro sexual y a conocer a otra persona, a salir de la zona cómoda, “pues seguimos siendo personas tengamos la edad que tengamos. Está el mundo a nuestra disposición para ser descubierto otra vez”. Es por eso que la directora del Centro Miintimidad entrega ocho prácticos consejos para esta etapa.

1) Es importante comunicarse con la nueva pareja, contar lo que se siente, sin miedos ni tratando de fingir lo que no se es realmente. Ir paso a paso, porque nadie nos está apurando: es importante hacer respetar los tiempos personales para retomar la vida sexual.

2) No buscar satisfacer al otro para agradarle, sino que avanzar lentamente de acuerdo con las necesidades propias, ya que eso beneficia a la relación de pareja nueva.

3) No tener tantas expectativas respecto a que la relación íntima, en esta “nueva primera vez”, será espectacular, pues seguramente no lo será y con el tiempo de conocerse más, mejorará.

4) No comparar lo que se vivió en el matrimonio o relación que se tuvo, pensando que debe continuarse ahora. Hay que experimentar el momento actual, concentrándose en esa etapa para disfrutarla.

5) Olvidarse de que las relaciones tienen que ser solamente centradas en el coito, pues el cuerpo está cubierto de piel, que tiene millones de terminaciones nerviosas dispuestas a ser exploradas.

6) El cerebro es el gran órgano sexual. Es relevante estar conectados con la nueva pareja, más allá de lo físico, para que la relación íntima funcione bien.

7) Es importante buscar un lugar donde la pareja se sienta cómoda, idealmente en el que no estén los hijos rondando, para concretar una relación sexual plena.

8) Disfrutemos el que no nos vemos todo el tiempo con la nueva pareja, sino que los encuentros son los fines de semana o en días programados, para estar solos. Estos momentos de intimidad son mejores, porque se va con la disposición de que las cosas fluyan positivamente.

“Lo ideal es que los encuentros sexuales vayan combinados con afectividad, cariño y respeto, además de aprender a responsabilizarnos de nuestro propio placer, para poder guiar a nuestra pareja”, recalca la especialista en sexualidad.