Se trata, según la denuncia, de una práctica que inicia desde las 4:00 de la madrugada, teniendo como principales víctimas a niños de nacionalidad venezolana, quienes tras ser puestos en arriendo por sus padres, son drogados para resistir largas horas de acompañamiento. Así, los adultos reciben las ayudas en nombre y bienestar de los pequeños.
“Quiero que viralicemos estas imágenes. Estas personas que se ven de grises son los encargados de organizar la venta y la distribución de niños en TransMilenio (sistema de transporte en Bogotá) a lo ancho y a lo largo”, se escucha en el inicio de un video tomado por el candidato a la Cámara de Representantes Édinson Cuéllar. La información fue retomada por medios colombianos como El Tiempo.
Según Cuéllar, se trata de una red de “alquiler y distribución” de menores de edad, que comienza de madrugada en las estaciones de la capital colombiana y se extiende durante todo el día, menoscabando los derechos de los más vulnerables.
En una grabación, tomada a escondidas por el denunciante, se observa a varios niños sentados en dicho lugar. Algunos adultos están de pie y serían quienes los rentan para que otros mendiguen con ellos.
“Salía a las 4 de la mañana hablar con las personas sobre mi candidatura (…) Pero me encontré con esta realidad. Niños dopados, los drogan. Desde las 4 (de la madrugada) hasta medio día, vale (la renta) 50 mil pesos y en horas de la tarde, hasta 60 mil pesos (12.500 pesos chilenos). Ciudadanos de todas las nacionalidades, venezolanos y colombianos”, asegura el candidato a congresista.
Cuéllar muestra a uno de los presuntos responsables de la práctica con una menor en brazos, quien permanece dormida. El hombre le habría confirmado que se trata de un modo de subsistencia para ellos.
“Y ellos me dicen que lo hacen porque tienen que sobrevivir. La niña lleva dormida desde las 07:00 de la mañana y es las 2:00 de la tarde”, sostiene el denunciante.
Dicho registro fue publicado en su cuenta de TikTok, y a inicios de semana ya contaba con decenas de miles de reproducciones. Los comentarios incluyeron a personas que aseguraban ser cantantes en las estaciones del TransMilenio, dando fe de la situación.
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Fiscalía colombiana confirmó en 2019 red de alquiler en metro bogotano
La denuncia realizada por el candidato Édinson Cuéllar no es nueva.
Hace poco más de dos años, el medio local Red + Noticias publicó una nota en la que mostraba imágenes de niños y niñas siendo rentados en el metro bogotano. Ésta incluye el testimonio de un vendedor informal en el sistema de transporte TransMilenio.
Resguardando su identidad, se escucha el relato de la fuente, asegurando que una mujer renta a sus hijos para que los usen para mendicidad.
“Hay un señor en el barrio Santa Fe donde comienza a alquilar los hijos de esta madre. Un valor entre 40 mil y 60 mil pesos por día”, asegura.
El equipo de prensa a cargo de la investigación acudió a la Fiscalía en la capital colombiana para presentar los registros. El fiscal Mario Gómez, delegado para la infancia y la adolescencia, confirmó que en efecto le daban seguimiento a bandas de tratas de personas que alquilan a menores venezolanos.
“No es un hecho, son cientos de hechos aberrantes y vulneradores de la dignidad de niños y niñas venezolanas, venezolanos, así como niños de otros lugares, así como de niños y niñas indígenas a quienes gente inescrupulosa utiliza criminalmente en el marco del delito que se conoce como trata de personas con fines de mendicidad ajena”.
El fiscal Gómez aseguraba que en ese periodo ya existían 16 investigaciones contra redes de trata de personas que se dedicaban a lucrar con el alquiler o renta de niños y niñas, con la complicidad de sus padres.
El vendedor ambulante que prestó su testimonio aseguró que algunos menores son sometidos a jornadas de hasta 12 horas en la calle. Durante ese tiempo reciben poca alimentación. Su tarea es acompañar a adultos, a quienes fueron rentados por sus padres, a pedir dinero en nombre de dichos infantes. Sin embargo, la Fiscalía sostiene que ocurre todo lo contrario.
“Piden limosna con el supuesto fin de alimentarlos, de darles techo y ropa y al final del día eso no ocurre”.
“Drogas y medicamentos psiquiátricos”
En el año 2019, los medios de comunicación colombianos intensificaban la publicación de denuncias y operativos, ante la difícil situación que enfrentaba -y sigue enfrentando-, la niñez venezolana en específico.
En Bucaramanga, al norte de la nación sudamericana, otro caso como el que denuncia el candidato Cuéllar desde Bogota: niños y niñas presuntamente siendo drogados para usarlos con fines de mendicidad ajena.
El medio RCN daba a conocer la desarticulación de una banda que drogaba y alquilaba bebés para pedir limosna.
“Es una red que se ha tomado Bucaramanga. Los medicamentos que se les dan a estos menores generan efectos secundarios como depresión y serias afectaciones en su salud. Pedir dinero solos les deja más o menos 30 mil pesos pero hacerlo con un bebé en brazos les puede dejar ganancias hasta de $100 mil (poco más de 20 mil pesos chilenos)”, aseguró Rafael Picón, personero de la ciudad, cuya gestión se dedica a velar por los derechos humanos desde el Ministerio Público.
Los niños y niñas que alcanzaban los 2 años, en ese entonces y según el reporte periodístico citado, son menos propicios a generar réditos económicos desde la mendicidad. Los que rentan infantes para mendigar, llevándolos en brazos, prefieren a los bebés quienes se mantienen dormidos por los efectos de los estupefacientes y son más fáciles de cargar.
A finales del año pasado, el gobierno colombiano promovió la Ley 2168 de 2021 que supone el endurecimiento de penas a quienes ejerzan esta práctica criminal contra niños, niñas y adolescentes. Es decir: Quienes usen para mendicidad ajena a menores de 18 años, por medio de ingesta de sustancias psicoactivas que inhiban su razón, juicio o voluntad, tendrán una pena de hasta 30 años de prisión.
Los padres que ceden a sus hijos tienen un apartado especial en la normativa. Quienes los faciliten para el acometimiento de dicho crimen perderán la patria potestad, se les retirará la custodia y no podrán recuperarla.
“La norma prohíbe la mendicidad infantil en Colombia y sanciona a aquellos que instrumentalizan a nuestros niños”, afirmó el congresista de Colombia Justa Libres, John Milton Rodríguez, al medio local Semana.
