Medios internacionales dieron cuanta de una situación ocurrida al interior de un café en Paju, Corea del Sur, donde una mujer portadora de coronavirus contagió a un total de 55 personas. El informe detalla que en esa instancia sólo se salvaron los garzones, quienes ocuparon mascarilla.

Según indicó el medio Bloomberg, la mujer asistió al lugar el pasado 8 de agosto, sólo tres días después supo que estaba contagiada con la COVID-19.

La historia indica que en el lugar existían las medidas de seguridad, aunque no era obligatorio el uso de mascarillas en los clientes.

La mujer ingresó a las 19:30 horas al recinto con un amigo. Luego ambos pidieron bebidas en el mostrador del primer piso y tras unos minutos subieron al segundo. Allí escogieron una mesa cercana a las escaleras, bajo uno de las salidas de aire acondicionado.

La pareja se marchó del recinto cerca de las 22:00 horas, cuando el recinto cerró para el público.

CNN
CNN

Luego que se descubriera que tenía coronavirus, se informó al local y se inició la trazabilidad del caso. Cinco días después se había descubierto que otras 55 personas se habían infectado.

No obstante, los cuatro garzones del local no contrajeron el virus durante esa jornada, debido a que habían usado mascarillas durante todo momento.

Expertos de aquel país indicaron que el aire acondicionado del lugar jugó un “papel clave” para que el virus se diseminara con mayor facilidad, a lo que se sumaba que un 80% de los clientes no portaba el barbijo.

Ante esto, la infectóloga coreana Ma Sang Hyuk indicó al citado medio que el uso de estos implementos de barrera son claves en la transmisión.

“Este brote pone de manifiesto el importante papel que pueden jugar las mascarillas. Estas no te protegen al cien por cien, pero no se puede negar que son efectivas”, concluyó.