Si en tu cuerpo encuentras bultitos ásperos de color rosa o blancos y que no duelen al tocarlos, lo más probable es que sufras queratosis pilaris, una afección cutánea que no es rosácea ni acné y que aunque no tiene cura sí posee formas de controlarla.

En primer lugar, se manifiesta por sequedad extrema de la piel y puede verse aumentada con la exposición al Sol, el agua muy caliente a la hora de ducharse (porque elimina lípidos naturales), la ropa muy ajustada, la poca ingesta de agua y el estrés.

En conversación con Women’s Health, la farmacéutica Meritxell Martí señaló que en el acné “hay una hiper estimulación de la glándula sebácea que, junto con las células muertas y otras sustancias de la piel, hace que se infecte el poro y aparezca el granito, que puede ir acompañado de pus o no”.

No obstante, en el caso de la queratosis pilaris se desarrolla justamente lo contrario.

“Es el folículo piloso que, debido a la extrema sequedad y la queratina de la piel, queda taponado y el pelo no puede salir, formando una obstrucción y eso provoca ese bultito que vemos y notamos en la piel”, explicó.

Desde la Clínica Mayo, en tanto, precisan que la queratosis pilar se debe a la acumulación de queratina, una proteína dura que protege la piel contra sustancias dañinas e infecciones.

La queratina elabora “un tapón escamoso que obstruye la abertura del folículo piloso. Por lo general, se forman muchos tapones, lo que causa zonas de piel áspera y desigual”, detallan en su web.

“No se sabe exactamente por qué se acumula la queratina. Pero puede ocurrir en combinación con enfermedades genéticas u otras afecciones de la piel, como la dermatitis atópica. Esta afección tiende a empeorar con la piel seca”, confirman desde la entidad.

Tratamientos

Si bien desde el centro médico reconocen que un paciente no necesita ir a médico para reconocer que sufre queratosis pilaris, sí afirman que un especialista podría entregar un diagnóstico más certero, aunque no se necesitan análisis.

De acuerdo a la literatura, la afección tiende a desaparecer pasados los 30 años, por sí sola, aunque cualquier persona que la sufre debe entender que no existe cura para ella.

Pese a lo anterior, sí hay formas de poder suavizar sus efectos en la piel, las que pueden ir de una mejor hidratación a cremas recetadas por un médico.

De acuerdo a la Clínica Mayo, las cremas que contienen alfa hidroxiácidos, ácido láctico, ácido salicílico o urea “ayudan a aflojar y eliminar las células muertas de la piel”.

Sin embargo, no se recomienda su uso en niños, ya que los ácidos presentes en esos productos pueden causar causar enrojecimiento, escozor o irritación.

A la lista se suman las cremas para prevenir los folículos obstruidos, que son derivadas de la vitamina A (retinoides tópicos), que favorecen la renovación celular y previenen la obstrucción de los folículos pilosos, aunque no se recomiendan en embarazadas o mujeres que estén amamantando.

“El uso regular de crema medicinal puede mejorar la apariencia de la piel. Pero si lo detienes, la enfermedad vuelve. E incluso con el tratamiento, la queratosis pilaris tiende a persistir varios años”, advierten desde el recinto.

Por su parte, Martí recomienda poner el foco en la exfoliación. “Aplicar exfoliantes corporales puede ayudar a disgregar esa queratina y evitar la formación del bultito. En general, como es una afección muy dependiente de la sequedad de la piel, al hidratarla suele mejorar mucho”.

Pero no todos los productos sirven. “Hay que exfoliar con productos que contengan exfoliantes enzimáticos, como la papaína y la bromelaina (más naturales). Los exfoliantes mecánicos siempre hay que aplicarlos de forma muy suave porque la piel es muy sensible y la podemos dañar e inflamar”, dijo.

En concordancia con Martí, desde la Clínica Mayo recomiendan como medidas de autocuidado usar agua tibia en la ducha y limitar el tiempo del baño, tratar la piel con suavidad, ocupar productos humectantes y evitar la fricción de la ropa muy ajustada.