Dos de los seis rinocerontes negros sudafricanos que fueron enviados en mayo al parque de Zakuma, en el sureste de Chad, donde desaparecieron hace casi medio siglo, fueron encontrados muertos recientemente, informó el domingo la organización African Parks.
“Podemos confirmar que estos dos rinocerontes (un macho y una hembra) no fueron presas de la caza furtiva. No obstante, se desconoce por ahora la causa exacta de su muerte”, indicó en un comunicado la oenegé protectora de la fauna salvaje, que administra los parques naturales en África.
African Parks precisó que los otros cuatro rinocerontes siguen vivos y “están siendo vigilados de cerca”.
En mayo, una iniciativa conjunta entre African Parks, los parques sudafricanos (SANParks), y los gobiernos de ambos países permitieron la reintroducción de seis rinocerontes negros de Sudáfrica en el parque de Zakuma, en la sabana del sureste de Chad.
Esta reubicación se hizo con el fin de darle un nuevo hogar al rinoceronte negro, cuyo último ejemplar de esta especie que se observó en esta zona fue en 1972.
Chad y Sudáfrica firmaron un acuerdo de cooperación destinado a proteger la biodiversidad y asegurar la supervivencia a largo plazo de especies animales amenazadas en Zakuma.
Tras siete años de esfuerzos, esta iniciativa permitió reducir la caza furtiva casi a cero, impulsando así la reintroducción de rinocerontes.
Cada año, miles de rinocerontes son sacrificados en África por sus cuernos, muy apreciados por los practicantes de medicina tradicional en China o Vietnam.
Quedan 5.000 ejemplares de rinocerontes negros en el continente africano, de los cuales casi 1.900 están en Sudáfrica.
Antes de Chad, los rinocerontes negros ya habían sido enviados a Botsuana, Tanzania, Zambia, Malaui y Ruanda.