Contrario a la creencia popular, en algunos casos lo recomendable sería despertar, cuidadosamente, al sonámbulo.

Una de las creencias más arraigadas en la sociedad es la de que nunca se debe despertar a un sonámbulo. Si bien puede resultar angustiante para la persona ser despertado en este estado, lo cierto es que no es peligroso hacerlo. Por el contrario: en algunos casos sería lo recomendado.

El sonambulismo es un trastorno del sueño que sucede cuando las personas, generalmente niños o jóvenes, caminan o hacen otra actividad estando aún dormidas. Contrario a la creencia popular, es poco probable que despertar a un sonámbulo implique un riesgo mayor para la salud. Es más, según los expertos, en caso de presenciar a alguien en este estado, lo prudente es ayudarle a volver a la cama y, si es necesario, despertarle.

La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (MedlinePlus) señala que el sonambulismo se caracteriza por:

  • Tener una expresión facial ausente
  • Abrir los ojos durante el sueño
  • No recordar el episodio de sonambulismo al despertar.
  • Realizar una actividad detallada de cualquier tipo durante el sueño.
  • Sentarse erguido y parecer despierto durante el sueño.
  • Hablar durante el sueño y decir cosas que no tienen sentido.
  • Caminar mientras se duerme.
  • Al despertar, la persona puede mostrarse confundida y desorientada.
  • Comportamiento agresivo cuando alguien la despierta.
  • ¿Se debe despertar a un sonámbulo?

    Según un artículo publicado en la Western New York Urology Associates, el mito de que siempre se debería dejar tranquila a una persona sonámbula proviene de una antigua creencia de que el alma deja el cuerpo durante el sueño y que, si se despierta a un sonámbulo, este será un cuerpo sin alma. Por otro lado, un razonamiento más científico suponía que despertar al sonámbulo incrementaba su riesgo de un ataque cardiaco.

    La recomendación inicial cuando uno se encuentra con una persona en este estado sería, de forma gentil y sin despertarlos, tratar de guiarlos de vuelta a la cama. Esto, para evitar posibles reacciones indeseadas en el sonámbulo, como angustia o resistencia. Sin embargo, en algunos casos despertarlo podría ser la opción más adecuada si los intentos de devolverlo a la cama son en vano.

    “Es difícil y con frecuencia innecesario despertar a un sonámbulo, pero hacerlo podría ser la mejor opción si la persona se niega a regresar a la cama con orientación suave”, asegura el artículo.

    Según MedlinePlus, una idea errada sobre el sonambulismo es que la persona no puede lastimarse cuando camina dormida. En realidad, los sonámbulos se lesionan fácilmente y con regularidad cuando tropiezan y pierden el equilibrio.

    Por qué ocurre el sonambulismo

    Según MedlinePlus, el sonambulismo, o caminar dormido, está vinculado al ciclo normal del sueño, específicamente al sueño profundo no MOR (desincronizado), especialmente durante las primeras horas de la noche (sueño N3). Este fenómeno es más común en niños, y tiende a disminuir con la edad debido a la reducción del sueño N3 en adultos. La predisposición genética también juega un papel, puesto que el sonambulismo tiende a ser hereditario.

    Factores como la fatiga, la falta de sueño y la ansiedad están asociados con el sonambulismo. En adultos, ciertos elementos pueden desencadenar episodios de sonambulismo, como el consumo de alcohol, sedantes u otros medicamentos, incluyendo algunas pastillas para dormir. Además, condiciones médicas como convulsiones y trastornos mentales también pueden contribuir al sonambulismo en adultos.

    En el caso de adultos mayores, el sonambulismo puede ser un síntoma de trastornos neurocognitivos que afectan las funciones mentales.

    Cuándo y cómo tratar el sonambulismo

    Según MedlinePlus, la mayoría de las personas que experimentan sonambulismo no requieren un tratamiento específico. En algunos casos, la hipnosis y los despertares programados pueden ser beneficiosos para ciertas personas.

    Sin embargo, la entidad también sostiene es aconsejable discutir esta condición con un proveedor de atención médica si la persona presenta otros síntomas. Por ejemplo, si el sonambulismo es frecuente o persistente, o si se realizan actividades potencialmente peligrosas, como conducir un vehículo, mientras está sonámbulo.