El cáncer de próstata suele tener buen pronóstico cuando se detecta a tiempo, el problema es que suele ser silencioso, y los síntomas aparecen cuando la enfermedad ya está avanzada. Por lo mismo, los exámenes preventivos a partir de los 40 años son fundamentales.

Muchos hombres son reacios a realizarse chequeos preventivos e ir al médico. No obstante, estos son necesarios para prevenir y detectar a tiempo enfermedades cómo el cáncer de próstata, que suele ser asintomático en sus primeras etapas.

El problema es que muchos consultan cuando ya está avanzado.

Un informe de Globocan, señala que 1.4 millones de hombres son diagnosticados con este tipo de cáncer en el mundo y 8.157 son chilenos. De estos, 2.296 murieron a causa de la enfermedad, equivalente a un 28%.

“Tanto en Chile como en el resto de los países, el cáncer de próstata ha ido en aumento. Actualmente, es el más prevalente en el mundo, y el número uno en hombres sobre 50 años, pero en general es poco mortal, es el sexto en mortalidad y en contraparte es el número uno en prevalencia”, explicó el urólogo de la Clínica Biobío, Gianfranco Innocenti.

Asimiismo, el urólogo de Clínica Santa María, Alfredo Velasco, aseguró que “13 de cada 100 hombres en Chile tiene esta neoplasia. Y la mortalidad de esta enfermedad supera al cáncer de mama: actualmente 1 hombre se muere cada 8 horas y, por eso, es importante hacer un chequeo al menos una vez al año a partir de los 40 años”.

¿Por qué el cáncer de próstata es tan silencioso?

La próstata es una glándula que tiene forma de nuez y se ubica debajo de la vejiga, delante del recto. Con la edad, su tamaño puede aumentar, así como el riesgo de cáncer.

Alfredo Aliaga, urólogo de Clínica Dávila Vespucio señaló que esta enfermedad suele ser asintomática “porque afecta a una parte de la próstata más bien periférica, por lo que no tiene síntomas de lesiones que la gente tiende a confundir como; el calibre del chorro de orina, ir muchas veces al baño, etc”.

Cuando comienza a presentar síntomas, es cuando ya ha empeorado. “En general, los signos ocurren a las etapas tardías de la enfermedad avanzada, como el dolor de huesos por metástasis. Casi siempre las señales que la gente visualiza son producto del crecimiento benigno de la glándula”, expresó el profesional.

El urólogo de Clínica Dávila, Christian Urzúa, coincide con sus colegas y hace énfasis en que “para su diagnóstico precoz es de vital importancia el chequeo y control anual. Si bien su causa exacta se desconoce, existen algunos marcadores de riesgo que podrían aumentar las posibilidades de aparición como la edad y factores hereditarios”.

Por otro lado, Cristóbal Mulchi, urólogo de Clínica Ciudad del Mar agregó que “los factores de riesgo para este tipo de patología no son modificables, o sea, la edad y el antecedente familiar de primer grado son cosas que uno no puede cambiar, por lo tanto, es súper importante la búsqueda temprana de esta patología”.

Exámenes preventivos

Por lo mismo, los profesionales aconsejan realizarse los exámenes preventivos a partir de los 40 años, especialmente quienes tienen antecedentes familiares.

“Es indispensable realizarse el antígeno prostático, que es un examen de sangre, y de tacto rectal, lo que se conoce como screening de cáncer de próstata o tamizaje”, afirmó Mulchi.

Si bien este cáncer no se puede prevenir, “sí se puede es hacer un diagnóstico precoz”, enfatizó Velasco.

“Para eso, es necesario realizar un antígeno prostático específico, un examen de sangre que permitirá entregar al paciente un tratamiento a tiempo. Esta patología tiene diversas formas de ser tratado tratamientos y la cirugía no es la única opción. Puede haber terapia focal, braquiterapia, radioterapia, tratamiento hormonal y una serie de otras alternativas y eso dependerá si la enfermedad está en una etapa localizada, intermedia o avanzada”, finalizó.