Un joven de 29 años fue atropellado mientras participaba del funeral de Kevin Garrido, condenado por su participación en la instalación de artefactos explosivos y quien fue asesinado por otros reos al interior del centro penitenciario Santiago Uno.

El afectado, identificado como Sebastián Orellana, habría sido impactado en una primera instancia por un objeto contundente, lo que le provocó una fractura en el cráneo.

Posterior a esto, testigos aseguran que un carro lanza aguas de Fuerzas Especiales de Carabineros habría atropellado a la víctima luego que funcionarios de la institución intervinieran el cortejo fúnebre. El hombre resultó con dos fracturas expuestas.

Así lo detalló su madre, Marisol Gallegillos, quien aseguró que interpondrán una demanda en contra de quienes resulten responsables.

Tras el incidente, Sebastián Orellana fue trasladado hasta el Hospital Barros Luco, donde se encuentra grave a la espera de ser intervenido tanto en la zona del cráneo cómo en las piernas.

Carabineros, mediante un comunicado, negó que un vehículo policial atropellara al hombre.