Funcionarios del Servicio Nacional de Aduanas que revisaban los estacionamientos del paso fronterizos Monte Aymond en la región de Magallanes, encontraron abandonada una tortuga hembra viva, adulta, abandonada a su suerte.
De inmediato, tal como indica el protocolo, pusieron al quelonio al cuidado del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG).
Al respecto, el director regional de la Aduana de Punta Arenas, Rodolfo Valenzuela, indicó que “es necesario reforzar en los viajeros que si se quiere ingresar al país con animales vivos, es necesario contar con los certificados de los organismos correspondientes, en este caso, el SAG. Además, ocultarlos en el equipaje constituye la figura de contrabando”.
En paralelo, en el paso Mamuil Malal de La Araucanía, al revisar un vehículo que retornaba desde Argentina, los fiscalizadores de Aduanas encontraron una bolsa de regalo con prendas de vestir de piel de animal.
La revisión les permitió determinar que se trataba de una gorra y una estola de confección artesanal. El análisis exhaustivo arrojó que el gorro estaba hecho con piel de gato montés argentino, mientras que la estola se había confeccionado con piel de zorro culpeo.
Los funcionarios procedieron a incautar la mercancía y a denunciar al portador por presunto delito de contrabando al intentar ingresar al país especies protegidas por la Convención Internacional CITES, que protege la flora y fauna en peligro de extinción.
