Suena la alarma, te pones de pie, ingresas a la ducha, calientas agua para tomar desayuno, lavas la loza y sales de la casa. Así comienza la rutina de gran parte de los chilenos, algo usual y cotidiano. Pero qué ocurriría si no contáramos con algo tan indispensable para realizar estas acciones, como lo es el agua.
Es difícil de pensar, sin embargo, esa fue la realidad de cerca de 2.800 habitantes de Puerto Octay, comuna donde el 60% de la población pasó 20 días sin agua. Corte que duró más que las emergencias registradas en Osorno, Los Ángeles o Chiguayante.
Todo comenzó la jornada del 11 de septiembre, luego que la alcaldesa de la comuna, María Elena Ojeda, comunicara la suspensión del servicio que es administrado por el municipio, a raíz de la presencia de hidrocarburo en el agua.
“Creemos que el agua venía con algún líquido que no correspondía, en este caso podemos decir petróleo o bencina. No tenemos claridad de lo que realmente era”, dijo Ojeda cuando inició la emergencia.
Tras presentar la denuncia correspondiente, el municipio inició un sumario interno. En primera instancia se determinó que todo se originó en el sistema de clorificación del agua, donde se encontró un envase con residuos de combustible.
La Fiscalía también dio paso a una investigación, para determinar cómo ocurrió el hecho y las responsabilidades del caso.
¿Y el agua cuándo?
Los días comenzaron a correr. Camiones aljibes llegaron a la zona para entregar suministro a los vecinos. Puerto Montt y Osorno fueron algunas de las comunas que acudieron en ayuda.
Pese a esto, la pregunta entre los vecinos era la misma: ¿cuándo volverá el agua?.
Orita Vejar vive en la Villa Puerto Octay, principal sector afectado. “Otros dicen una semana, otros un mes, para nosotros es difícil, el lavado, las cosas de la casa”, dijo la mujer.
Agregó que “sabíamos que los viernes a tal hora cortarían el agua, entonces uno se preparaba… pero ahora ya que esto sea indefinido, es difícil”, manifestó Orita.
Hernan Hausdorf, es dueño de una panadería de la zona. Para él, operar su negocio se complicó con la falta de suministro, siendo su único apoyo el aporte que entregaban los camiones aljibes.
“Nos abastecemos a través de los bidones”, dijo el hombre a Radio Bío Bío tras el corte. Pese a esto, comentó que durante los primeros días fue difícil para su negocio, misma respuesta que entregaban diversos locatarios de la zona.
Fiestas Patrias… sin agua
Llegaron las Fiestas Patrias, y 2.800 habitantes de la comuna continuaban sin agua. Esto impactó directamente en el comercio en la zona, la que presentó mermas producto de la emergencia.
Cristian Oyarzun, locatario de un puesto de comidas, señaló que las bajas fueron cerca de un 60%.
“Hemos tenido que comprar estanques grandes, suministrar agua nosotros, comprar a privados agua certificada que hay que tener. Todo eso es un costo adicional”, añadió el comerciante.
En conversación con BioBioChile, la alcaldesa de la comuna manifestó que tras la emergencia trataron de apoyar tanto a los comerciantes como los fonderos, con estanques e hidropacks.
“Tuvimos hasta desfile”, añadió María Elena Ojeda, sin embargo, reconoció que el principal sector afectado fue el hotelero. “Ellos se vieron muy afectados, porque hubo reservas que no se pudieron cumplir porque no había agua para servicios higiénicos”, añadió la autoridad comunal.
¿Quién es el responsable?
La responsabilidad por esta emergencia continúa en una nebulosa. Por un lado algunos apuntan a la participación de terceros, otros a la falta de rigurosidad de las empresas que realizaban trabajos en la planta, y los últimos señalan al propio municipio, por ser el organismo encargado de administrar el agua.
La seremi de Salud de la región de Los Lagos, Scarlett Molt, manifestó que ellos como institución, desde el primer día comenzaron las sanciones sanitarias.
“Desde el día uno de la emergencia comenzó una prohibición de funcionamiento de la planta, y con ello un sumario sanitario que va a tener responsables y sanciones”, señaló la autoridad de Gobierno.
Esto es independiente de la investigación que realiza tanto la Fiscalía como el municipio. En ambos casos aún no hay resultados.
Consultada sobre si hay algún tipo de responsabilidad por parte del municipio, la secretaria regional ministerial indicó que “claramente era el municipio quien administraba este sistema particular de agua potable. Ellos ya habían tenido sanciones y sumarios sanitarios en curso”.
Por este motivo desde el año pasado se encontraban realizando trabajos de mejoramiento en la planta, como la instalación de filtros.
“El sistema tiene responsabilidad de quien lo administre, y quién lo administró en este caso era el municipio, por eso es que entre los temas que seguimos vigilando, es que el municipio mantenga los protocolos que hoy se están implementando”, enfatizó Molt.
Lo mismo se le preguntó a la alcaldesa, quien dijo que “aún no se puede hablar de responsabilidad, sería irresponsable decir algo, porque al final si hicimos la denuncia es porque estamos esperando una respuesta”.
Ni la sombra de un ministro
Durante el transcurso de la emergencia, una de las principales críticas de las autoridades comunales fue la falta de ministros en la zona.
“Me impresiona que a 21 días sin agua para el consumo humano, no se haya hecho presente en la comuna un Ministro de Estado”, dijo la alcaldesa a través de un comunicado el día 1 de octubre, publicado en la página de Facebook de la municipalidad.
“Cuando tuvimos el tema del puente en Cancura, estuvo el ministro Fontaine acá y de alguna forma fortaleció la seguridad de los vecinos… hoy nos vemos en esta segunda emergencia y la verdad es que los ministros deben hacerse presente en las comunas chicas”, enfatizó María Elena Ojeda a BioBioChile.
“Entiendo el sentir de la alcaldesa, desde el punto de vista que hubiese querido más compañía de autoridades nacionales… lo único que puedo garantizar es que el rol que la autoridad sanitaria realizó, es exactamente el mismo”, dijo la seremi Scarlett Molt, tras ser consultada por este tema.
Esto generó una sensación de que la emergencia pasó desapercibida por algunas autoridades.
“Esa es parte de las quejas que uno siempre escucha, en Santiago puede haber una inundación y salen todos a terreno, y aquí podemos estar hasta el cogote. Lo mismo pasa en Osorno. Las comunas chicas no tienen la misma importancia…”, añadió la alcaldesa, quien agregó que “en eso sí puedo ser muy crítica de parte de nuestros ministros… yo sé que de una forma en Santiago van a mover los palillos para que lleguen los recursos”.
No, no habrá compensación para los habitantes
El jueves 03 de de octubre, a dos días que volviera el suministro, el seremi de Economía, Francisco Muñoz, indicó que luego que el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) oficiara al municipio por la interrupción del servicio, no se pesquisaron boletas que acrediten la situación.
¿En qué derivó esto?, en que los habitantes de Puerto Octay afectados no recibirán compensación.
La autoridad de Gobierno agregó que se considera que el municipio es una corporación privada con derecho público y que no cuenta con un rol de ingreso de prestación de servicios de agua potable, por lo que no podría actuar la ley del consumidor.
La determinación del Gobierno fue confirmada por la misma alcaldesa de Puerto Octay.
“En este minuto no”, dijo María Elena Ojeda, quien justificó que el municipio cuenta con una deuda cercana a los 14 millones de pesos, por los trabajos que se realizan, sumado a que cerca del 70% de los clientes no pagan las boletas, las que según la alcaldesa, bordean entre los tres mil y cuatro mil pesos.
Desde la Mesa Ciudadana del Agua señalaron que realizarán muestras independientes, a raíz de la desconfianza que les generan los resultados de las tomas realizadas por la Seremi de Salud.
Hecho que fue criticado por la alcaldesa, quien dijo que por qué no cuestionaron el antiguo servicio que tenían, donde, según manifestó “vivieron años con agua turbia”. “Me molesta. Cómo no alzaron la voz por las irregularidades que existían en Puerto Octay antes”, agregó.
Las investigaciones continúan, pese a las sanciones sanitarias que se aplicaron, no se sabe de mayores responsabilidades.
Habitantes de la zona señalan que el agua sigue saliendo turbia en algunos sectores, mientras que desde el municipio apuntaron a que sería por los trabajos de mejoramiento y no por la continuidad de la contaminación, la que finalmente se determinó que era benceno.
