Luego de registrar una nueva licitación desierta, será el municipio de Osorno el que se haga cargo de la administración del terminal de buses de la ciudad, por un periodo inicial de dos meses, aún cuando dependerá de que encuentre un concesionario.

El control del rodoviario estuvo a cargo de un particular contratado de manera directa por la entidad edilicia, luego de que el anterior concesionario no fuera capaz de pagar la deuda de 290 millones de pesos contraída.

Sin embargo, tras varios meses, la administración actual deberá dejar el recinto, siendo ahora el municipio con su propio personal quien se hará cargo mientras se levanta un nuevo proceso de licitación.

Esta nueva licitación declarada desierta es una situación ya conocida, pues no es primera vez que un llamado de este tipo fracasa, al no haber interesados en administrar el rodoviario. Algo que para el alcalde Jaime Bertín es lamentable pero común en este tipo de procesos.

Respecto a la deuda contraída con el municipio por parte del anterior concesionario, Bertín afirmó que de todas formas se deben recuperar los 290 millones de pesos que debía recibir la entidad que dirige como forma de pago.

Precisar que el municipio administrará el terminal de buses de Osorno a partir del próximo jueves 1 de junio.