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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

La Dirección Meteorológica de Chile emitió una alerta por un nuevo episodio de altas temperaturas que impactará siete regiones del país, con máximas de hasta 36 grados Celsius. Este fenómeno, previsto entre el 9 y 11 de enero, se atribuye a factores climáticos como una circulación ciclónica y dorsal en altura. Se aconseja precaución en la agricultura, salud, y sistemas de riego, ya que las autoridades locales están en alerta ante el riesgo de incendios forestales.

La Dirección Meteorológica de Chile (DMC) advirtió este lunes sobre un nuevo fenómeno de altas temperaturas que afectará a siete regiones del país, con máximas que podrían alcanzar los 36 grados Celsius en algunos sectores.

El aviso meteorológico especifica que el aumento de las temperaturas se debe a una combinación de factores climáticos. “El suceso ocurre debido a la presencia de una circulación ciclónica en superficie y una dorsal en altura en la zona central, junto a aporte de flujo del este”, señaló la entidad.

El organismo informó que las temperaturas más altas se registrarán entre el jueves 9 y el sábado 11 de enero. Las zonas afectadas incluyen sectores precordilleranos, valles y la cordillera de la costa de las regiones de Coquimbo; Valparaíso; Metropolitana; O’Higgins; Maule; Ñuble y Bío Bío.

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Ante esta situación, la DMC destacó la importancia de tomar medidas de prevención, especialmente en el ámbito agrícola. La sección de Meteorología Agrícola emitió una advertencia adicional debido al potencial impacto en los cultivos.

“Es importante recordar a los agricultores y usuarios que los valores presentados son pronosticados, por lo que pueden sufrir modificaciones”, puntualizó el informe oficial.

El organismo también subrayó que este evento climático podría generar riesgos en otros sectores sensibles, como la salud y los sistemas de riego.

Así las cosas, las autoridades locales de las regiones afectadas se encuentran en estado de alerta, considerando que las altas temperaturas aumentarían el riesgo de incendios forestales.