La denuncia se conoció el 9 de abril en el Tercer Juzgado de Garantía de Santiago, donde se resolvió instruir al Sename que tome las medidas correspondientes para resguardar la seguridad del imputado.

Ángel, el joven de 17 años que figura como único detenido en el caso del secuestro y posterior homicidio del exmilitar venezolano, Ronald Ojeda, acusó agresiones durante su estadía en un centro de reclusión del Sename.

Cabe recordar que Ojeda, reconocido opositor a Maduro, fue secuestrado el 21 de febrero y encontrado sin vida 9 días después en una toma de la comuna de Maipú, en la región Metropolitana. El cuerpo fue puesto en una maleta y enterrado a casi un metro y medio de profundidad.

Luego del descubrimiento, la Fiscalía logró la detención del adolescente, quien luego reconoció haber estado el 21 de febrero en el auto que ayudó en el rapto del exmilitar venezolano. Asimismo, dijo al Ministerio Público que fue contactado por un conocido que tenía vínculos con el Tren de Aragua, pero que desconocía los motivos del secuestro.

El detenido fue dejado en prisión preventiva y enviado a un centro del Servicio Nacional de Menores, Sename, en Til-Til, lugar donde habría sido víctima de agresiones por parte de otros jóvenes. La situación se conoció luego de que el único imputado por el Caso Ojeda denunciara la situación.

Según información de La Tercera, el 8 de abril pasado la directora (s) del penal, Susan Salinas, denunció ante la Fiscalía Local de Chacabuco los hechos.

La encargada del recinto aseguró que “el día sábado 30 de marzo, durante el día, ocurre una situación en espacio de patio donde varios jóvenes se encontraban jugando con golpes. Al acercarse él (a la víctima), luego de haber estado en espacio de TV, es agredido por los jóvenes T.S, A.G y L. T.”.

Agrega que el detenido por el caso del exmilitar venezolano “refiere que el joven F. S. se encontraba presente incitando la agresión. El mismo día, estando en la sala de TV, el joven L. T. se le acerca y ahorca con su brazo (“me hace yoga”), frente a lo cual Á. intenta zafarse y defenderse, indicando ‘me asusté porque no podía respirar’”.

Hostigamientos que siguieron ese mismo día en el “espacio donde se encuentra refrigerador” del recinto. Ahí, “estaba L.T., quien con tono de amenaza le muestra un arma artesanal, haciendo gestos de agresión contra A., indicándole que le pegaría puñaladas. Se solicita a unidad de salud constatación de lesiones en función de su relato”, dijo Susan Salinas.

La denuncia se conoció el 9 de abril en el Tercer Juzgado de Garantía de Santiago, donde se resolvió instruir al Sename que tome las medidas correspondientes para resguardar la seguridad del imputado.