Los condenados eran parte de una célula del Cartel de Sinaloa, que intentó instalarse en la zona en 2020 para enviar droga a Europa desde Chile.

Dos hermanos de nacionalidad mexicana, miembros del peligroso Cartel de Sinaloa, fueron condenados por el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Iquique, por los delitos de tráfico ilícito de estupefacientes y asociación ilícita para el tráfico de drogas.

Se trata de los hermanos Ricardo y Yolanda Salazar Tarriba, quienes eran parte de una célula del grupo criminal que intentó instalarse en la zona en 2020 para enviar droga a Europa desde Chile.

Según una investigación encabezada por la Unidad Regional de Drogas de la Fiscalía de Tarapacá y la Brigada Antinarcóticos Iquique, se logró determinar que los ahora condenados buscaban abrir una “línea de salida” de clorhidrato de cocaína, importadas desde Bolivia.

La idea era acopiar la droga en Alto Hospicio, para, finalmente, haciendo uso de las plataformas comerciales, portuarias y aeroportuarias, lograr su envío hasta diversos puertos y aeropuertos de Europa, como Bélgica, Holanda y España.

Así, las pesquisas lograron identificar a los hermanos Salazar Tarriba, quienes arribaron a Chile y a la región de Tarapacá para coordinar la compra y recepción de la droga.

Ambos adquirieron para la organización criminal mexicana un poco más de 6 mil kilos de clorhidrato de cocaína que serían enviados a Europa, como muestra para potenciales compradores.

Aunque, estas operaciones eran instruidas por Morris O´Shea – hijo de Yolanda Salazar-, miembro activo del cartel de Sinaloa y quien residía en España.

Condenado ingresó a Chile de forma clandestina por Colchane

Si bien las diligencias realizadas aquel año permitieron detener a Ricardo y Yolanda Salazar Tarriba en marzo de 2021, cuando se disponían a abandonar el país, no fue posible detener a Morris O´Shea, pese a las coordinaciones con la Fiscalía y la Guarda Civil española.

Por ello, la Fiscalía de Tarapacá solicitó que se cursara un pedido de extradición en su contra, con la información de que este se encontraría en Sinaloa, México; y luego que fuera formalizado en ausencia por los delitos de tráfico ilícito de estupefacientes y asociación ilícita.

Según destaca Poder Judicial, Ricardo Salazar ingresó el 4 de septiembre de 2020 a nuestro país, de manera clandestina, por el sector fronterizo de Colchane.

A partir de ese momento, comenzó a reclutar a una serie de personas para que cumplir funciones como tomar contacto con proveedores bolivianos, a fin de adquirir la sustancia ilícita que posteriormente será remesada a Chile para su posterior acopio; hacer reservas hoteleras, conocer la situación portuaria y aeroportuaria de nuestro país, recibir remesas de dinero desde el extranjero, recibir las remesas de drogas enviadas desde Bolivia, acopiarlas y trasladarla.

Fiscalía destacó condena a miembros del Cartel del Sinaloa

Finalmente, en resolución unánime, el tribunal –integrado por los magistrados Franco Repetto Contreras (presidente), Juan Pozo Araya y Carlos Perasso Adunce (redactor)– tras la deliberación de rigor, dio por acreditado tanto la ocurrencia de los delitos como la participación culpable de los acusados en los hechos.

La audiencia de comunicación de la sentencia quedó programada para las 12:40 horas del martes 5 de diciembre próximo.

Al respecto, el fiscal regional de Tarapacá, Raúl Arancibia, destacó que “el trabajo fue muy importante por cuanto se pudo utilizar todas nuestras técnicas de la Ley 20.000 en forma muy exitosa y que culminó con la detención de estas personas”.

“Además, se pudo coordinar e intercambiar antecedentes con la policía española, porque el destino de la droga iba a ser Europa entrando por España”, indicó el persecutor.

“El veredicto reconoce los vínculos que se tenían con este cartel mexicano, conocido por su peligrosidad y su tamaño. Y lo importante es destacar que pudimos determinar con anticipación la posibilidad de que esta gente pudiera instalarse acá y desarrollar toda una investigación que permitió frustrar la instalación de esta gente y utilizar nuestras rutas y nuestros puertos para embarcar droga a España”, concluyó el fiscal Arancibia.