Codelco fundamentó, en distintas comisiones del Congreso, el cierre de la fundición Ventanas, argumentando que se hizo para "evitar riesgos reputacionales, sociales, ambientales y legales". Además, este jueves, el directorio de la empresa estatal se reunirá con los trabajadores, para buscar acuerdos.

“Evitar riesgos reputacionales, sociales, ambientales y legales”. Éste fue el principal argumento que entregó, en el Congreso, el directorio de Codelco para decretar el cierre de la fundición Ventanas.

Según la empresa estatal, actualmente la planta no cumple con el estándar internacional de contaminación y, sabiendo que se está trabajando en modificar la normativa, su continuidad es insostenible para el mediano y largo plazo.

Sobre la inversión de 54 millones de dólares para adecuarse a las exigencias medioambientales, como lo exigieron los trabajadores, André Sougarret, presidente ejecutivo subrogante de Codelco, reiteró que esto solo ayudaría a disminuir las emisiones, pero se mantenía el riesgo de generar episodios de contaminación, como los que abundaron las últimas semanas en Quintero.

El alcalde de Puchuncaví, Marcos Morales, aseguró que el cierre de Ventanas no es la vía para solucionar los problemas ambientales de la zona, ya que hay un cordón de empresas que seguirán funcionando, debido a que la actual normativa lo permite.

El jefe comunal tuvo, además, un diálogo con la directiva de Codelco, en la comisión de Energía y Minería del Senado.

Andrea Cruces, presidenta del Sindicato Número 1 de la División Ventanas de Codelco, aseguró que como trabajadores y trabajadoras, se han sentido vulnerados.

Según adelantó el presidente del directorio de Codelco, Máximo Pacheco, este jueves, desde las 9 de la mañana, se reunirán con los sindicatos de la empresa para buscar un acuerdo respecto de la reubicación de las y los trabajadores, incluyendo a los de empresas contratistas.