El Ministerio de Justicia espera ingresar en diciembre al Parlamento el proyecto de modificación al Código Penal, ya que el actual data de 1874, por lo que existe coincidencia desde todos los sectores políticos en que necesita ser renovado.
No obstante, los avances en su diseño que fueron dados a conocer por el diario La Tercera, no dejaron conforme a un grupo de al menos 25 destacadas abogadas, quienes denunciaron la falta de participación femenina en el proceso.
En una carta dirigida al Gobierno, señalan que “durante mucho tiempo esta disciplina fue cultivada mayoritariamente por varones, como en muchas otras dominadas por una cultura profunda y arraigadamente machista. Pero desde hace décadas muchas han dedicado sus vidas a las ciencias penales, enriqueciéndolas con nuevas perspectivas y poniendo el acento en temas olvidados”.
Esto no dejó indiferente al Ejecutivo y si bien se había adelantado que el boceto sería remitido al Parlamento a fines de este mes, fue el ministro de Justicia, Hernán Larraín, quien señaló que ello no ocurrirá sino hasta la segunda semana de octubre.
Además calificó esta omisión como “un pecado de origen”, ya que se trabajó en base a equipos que venían de los dos Gobiernos anteriores, en los que no habían sido consideradas mujeres, por lo que aseguró que antes de ser enviado pasará por una evaluación de enfoque de género.
No obstante la respuesta no satisfizo a las juristas. María Inés Horvitz, miembro del Consejo de Defensa del Estado, señaló que reducir al enfoque de género el aporte que pueden realizar las mujeres, es desconocer las capacidades profesionales que poseen versus las de los hombres.
En esa línea, María Elena Santibáñez, académica de la Universidad Católica, indicó que es una medida insuficiente.
Las abogadas señalaron que no hay justificación alguna para el proceder del Ministerio, indicando que quizás la hubo en el siglo XIX, pero no en el siglo XXI, por lo que exigen ser consideradas en este proceso.
