El Ministerio de Salud logró revertir la paralización de las licitaciones de los hospitales de Puerto Octay y Río Negro, dictadas por el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia tras la solicitud de una empresa constructora que acusó errores en las bases de licitación.

Lo anterior, luego que el mes pasado, y por solicitud de la constructora Luis Navarro Spa, el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia suspendiera el proceso de licitación para la construcción de los hospitales de Río Bueno y Puerto Octay por considerar que las bases contenían errores que impedían que todas las empresas pudiesen participar en igualdad de condiciones.

Sumando al hospital de Queilen, que también fue impugnado ante el Tribunal, eran 3 los recintos suspendidos. Sin embargo, el viernes pasado el Tribunal revirtió la medida para 2 de los recintos, desestimando que existan una afectación a la libre competencia.

La susbsecretaria de redes asistenciales, Gisela Alarcón valoró la disposición del Tribunal y afirmó que seguirán trabajando para reanudar el proceso de construcción, al igual que con el hospital de Queilen, que aun sigue paralizado por orden del Tribunal.

El abogado demandante, Mauricio Zúñiga, explicó que la defensa del Ministerio ante el Tribunal fue más bien política. Agregó que otras empresas no han acudido a las mismas instancias judiciales, por temor a represalias del Ministerio.

El retraso de un mes que tuvieron, al menos estos 2 hospitales, podría tener impacto en su entrega final; dentro del cronograma conocido como 20-20-20 que impulsa el Gobierno.

Para el expresidente del Colegio Médico, Enrique Paris, estos retrasos perjudican a una población que tiene escaso acceso a la salud.

En tanto, otras fuentes afirmaron que el Ministerio se encuentra aún por presentar la defensa del hospital de Queilen para evitar que acumule más meses de retraso, argumentando también que todas las bases de licitación planteadas por el Ministerio fueron aprobadas por Contraloría.