Un bombardeo nocturno atribuido a Israel cerca de Damasco, Siria, mató a 15 combatientes prorrégimen extranjero, incluidos 8 iraníes, según un nuevo balance difundido por la ONG Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH).

El ataque alcanzó el martes por la noche un depósito de armas de los Guardianes de la Revolución, el ejército de élite del régimen iraní, en el sector de Kiswe, al sur de la capital, precisó el OSDH.

El ejército sirio interceptó dos misiles israelíes que se dirigían a ese sector, había informado previamente la agencia de noticias oficial siria Sana. Las televisiones estatales difundieron imágenes de la zona en llamas.

Quince combatientes extranjeros murieron por los bombardeos, entre ellos 8 miembros de los Guardianes de la Revolución, afirmó el director del OSDH Rami Abdel Rahman, que en un primer momento había señalado la muerte de 9 personas sin precisar su nacionalidad.

Una fuente médica citada por Sana informó de la muerte de dos civiles en una carretera que va de la capital a la ciudad de Deraa, en el sur, en una explosión ligada a la “agresión israelí”.

Desde el inicio de la guerra en Siria en 2011, Israel ha efectuado varios ataques contra el régimen de Bashar al Asad o sus aliados, el Hezbolá libanés e Irán.