El gobernador republicano de Florida, Rick Scott, se impuso ante el demócrata Bill Nelson en la disputa por una banca al Senado en Washington tras el recuento manual de votos cuyo resultado fue dado a conocer este domingo.

Según los resultados definitivos publicados por las autoridades electorales de Florida, Scott obtuvo 50,05% de los sufragios, una ventaja de un poco más de 10.000 votos respecto al senador saliente.

“Felicitaciones a Rick por una campaña valiente y coronada por el éxito”, escribió el presidente estadounidense Donald Trump en su cuenta de Twitter.

“Desde el primer día Rick jamás dudó. Fue un gran gobernador y será un aun más grande senador en tanto representante del pueblo de Florida”, agregó el mandatario.

Con esta victoria los republicanos, que ya estaban seguros de conservar el control de la cámara alta, logran una mayoría más cómoda.

“Acabo de hablar con el senador (saliente) Bill Nelson, quien gentilmente concedió mi victoria, y le agradecí por sus años de servicio público”, señaló Scott en su página de Facebook.

“Debemos hacer lo que loe estadounidense siempre hicieron: juntarnos por el bien de nuestro estado y de nuestro país”, remarcó lanzando un llamado a la unidad.

“Mi objetivo no será mirar hacia el pasado sino hacer exactamente aquello en lo que centré mi campaña: hacer funcionar Washington”.

Nelson, que era senador por Florida desde 2001, admitió su derrota a comienzos de la tarde del domingo.

En el mismo estado, el candidato demócrata para el cargo de gobernador, Andrew Gillum, reconoció el sábado haber perdido la elección ante el republicano Ron DeSantis.

Estos anuncios ponen fin a una particular situación electoral que recuerda el papel crucial jugado por Florida para determinar quién, entre el republicano George W. Bush y el demócrata Al Gore, había ganado las presidenciales de 2000.

La Corte Suprema dictaminó entonces que Bush había ganado la elección, con 537 votos de ventaja.