La hija del presidente estadounidense, Ivanka Trump, fue criticada por un supuesto conflicto de intereses luego que China le aprobara el registro de marcas de sus productos en el marco de la guerra comercial entre su padre y Pekín.

Ivanka Trump Marks LLC recibió la aprobación preliminar para el registro de 16 nuevas marcas en octubre, según la organización Ciudadanos por la Responsabilidad y la Ética en Washington (CREW, por sus siglas en inglés), que el lunes divulgó documentos y cuestionó la decisión.

“Ya que ha mantenido sus marcas en el extranjero, el público le seguirá preguntando si el presidente Trump ha tomado decisiones de política exterior basadas en su interés empresarial o el de su familia”, dijo Caroline Zhang, responsable de redes sociales del grupo sin fines de lucro.

Las marcas incluyen productos como carteras, sombrillas, gorras de baño y trajes de baño, según los documentos.

Los registros habían sido presentados en 2016 antes de la victoria de Trump y “mucho antes” que Ivanka se uniera al gobierno, dijo Peter Mirijanian, vocero de Abbe Lowell, abogado de ética de Ivanka.

“El registro de estas marcas fue pensado para proteger ampliamente el nombre de la Sra. Trump, y para evitar que otras personas roben su nombre y lo usen para vender sus productos”, afirmó al señalar que se trata “una práctica común”.

No obstante, el momento para la aprobación de Pekín levanta dudas: Trump impuso aranceles punitivos elevados sobre más de 250.000 millones de dólares en importaciones chinas, y las tarifas deben aumentar el 1 de enero.

Observatorios éticos han criticado repetidamente a Trump por sus continuas conexiones con intereses comerciales personales.

Tanto Ivanka como su esposo, Jared Kushner, son asesores de su padre, el presidente Donald Trump.