Una niña de 11 años fue violada y estrangulada el mediodía del domingo en la ciudad argentina de Junín cuando salió de su casa en bicicleta para ir a comprar pan, momento en el que fue captada por un sujeto de 40 años, soltero y sin antecedentes penales, según la investigación policial.

El cuerpo fue hallado maniatado en la bañera de una vivienda cuando la policía realizaba una requisa casa por casa tras la denuncia sobre la desaparición de la menor. El hombre sindicado como autor se encontraba en el inmueble y fue arrestado inmediatamente como el principal sospechoso.

“Fue un crimen flagrante. Le dijo a la policía que no se podía entrar al baño porque tenía una cañería rota y al correr la cortina de la bañera los oficiales se encuentran con esta escena monstruosa”, relató a la prensa el fiscal de Junín, Sergio Terrón.

El fiscal precisó que el hombre trabajaba en una residencia vacacional desde hacía cuatro meses y que su vivienda se encuentra a pocos metros de la casa de la niña.

“Yo no tengo ninguna duda de que el detenido es el autor, la prueba es contundente”, afirmó Terrón.

La autopsia indicó “que se trató de una asfixia mecánica por sofocación que le produjo un paro cardiorrespiratorio y previamente se pudo constatar que había sido ultrajada sexualmente”, añadió.

“Presentaba signos de haberse defendido y el detenido presenta rasguños”, agregó.

El caso fue clasificado como “homicidio doblemente agravado con alevosía y ensañamiento y le cabe una pena de reclusión perpetua”, dijo el fiscal.

Protestas

El asesinato conmocionó a Junín, una ciudad agrícola ganadera en el corazón de la rica pampa húmeda argentina, con unos 85.000 habitantes.

Por la noche, cuando los vecinos conocieron los detalles del caso, atacaron a la policía a pedradas, incendiaron dos patrullas y protagonizaron las revueltas que dejaron varios policías heridos tras una marcha para pedir justicia.

“Levantar las pruebas y sacar el cuerpo de la niña de la casa fue muy difícil”, relató Terrón.

Vecinos, además, intentaron atacar al sospechoso cuando era retirado esposado de la vivienda bajo una lluvia de piedras, según testigos.

Argentina registró 292 casos de femicidios en 2017, de los cuales 17% eran niñas o adolescentes, 33% tenía entre 19 y 30 años, 34% entre 31 y 50, y 15% era mayor de 50.