Claudio Bravo demostró una vez más que es un experto en atajar penales. En la gira del Manchester City por Asia, el chileno se plantó una vez más evidenciando que está de vuelta y en óptimas condiciones, tras la durísima lesión que lo tuvo alejado de las canchas por 11 meses.
Los ciudadanos se enfrentaron en la final del Asian Trophy ante el Wolverhampton Wanderers. Ambos equipos igualaron 0-0 en el tiempo reglamentario y el amistoso debió definirse en los lanzamientos penales.
En el primer lanzamiento, el chileno le tapó el penal a Conor Coady. Sin embargo, el City no estuvo tan certero en los lanzamientos y terminó cayendo en Shanghai por 3-2.
Ilkay Gundogan, David Silva y Lukas Nmencha erraron para los dirigidos por Pep Guardiola.
En los 90 minutos el City fue superior a su rival, pero no pudo concretar sus acciones de gol. De hecho, erraron un penal en el primer tiempo.
Ahora, el tercer desafío del equipo de Claudio será ante el Kitchee de Hong Kong, este miércoles 24 de junio.
