El bailarín Nelsón Mauricio Pacheco tuvo que reinventarse en medio de la pandemia, igual que millones de personas en Chile. Especialmente luego que la temporada de Bailando por un sueño, donde él era uno de los nuevos participantes, fuera suspendida indefinidamente.

Por ello hoy está trabajando como repartidor de Uber Eats. “Es una forma de hacer luquitas en esta situación, porque la verdad es que no hay bolsillo que aguante esta pandemia”, confesó a La Cuarta.

“Mi único ingreso es mi camioneta. Menos mal es petrolera y gasta poco. Se dio esta oportunidad y este par de días lo hemos hecho súper bien. No es tan difícil tampoco”, reconoce.

Eso sí, explica que entiende la importancia de respetar la cuarentena y quedarse en casa pero “pero el bolsillo no da, hay que pagar arriendo y hartas cosas. La plata no da, no dura para siempre y se acaba”.

El artista llegó el año pasado de Estados Unidos y comenzó a desarrollarse en el comercio vendiendo ropa, maquillaje y otros productos en algunos “corner” en un mall, negocio que se vio perjudicado con el Estallido Social. Además, sus labores como DJ también desaparecieron producto de la pandemia.

“Yo llegué de Estados Unidos el 16 de octubre, no me fui a la quiebra pero me costó mucho sacar adelante mi negocio, vender mi mercadería, quedé encalillado con unas tarjetas de crédito y después el coronavirus vino como a rematar todo”, explica.

Sobre su breve paso por el programa de baile de Canal 13, aseguró que fue literalmente “como ‘un sueño’. Me ayudó mucho, fue como un salvavidas”.

“En la situación en que estamos hay que buscar la manera en que se pueda nomás. Si de la tele me tengo que ir para el Uber no tengo rollos. Así es la vida y volveré al Bailando“, cierra.