Paty López está viviendo los momentos más serenos y felices de su vida, pues en abril pasado decidió dejar Chile para integrarse a un programa de seis meses en el centro de la Fundación Isha, en Costa Azul, Uruguay.

Allí vive bajo las enseñanzas de la maestra espiritual Isha Judd, creadora de un sistema de meditación y filosofía basado en el autoconocimiento y expansión de la conciencia. “Es un proceso que se trata de vaciarte, limpiarte del estrés y conocerte íntimamente”, explicó a Las Últimas Noticias.

Allí, la actriz le pidió matrimonio a su pareja de hace dos años y medio, cuyo nombre no quiere revelar. Ambos se casaron en una ceremonia simbólica hace algunas semanas.

“El hecho de vivir esta experiencia juntos nos pareció una idea excelente para sanarnos individualmente y como pareja. Fuimos muy valientes, somos sólo dos parejas haciendo los seis meses. Ha sido reconfortante, al principio no fue fácil pero es lo más bello que hemos hecho por nosotros. Nos decimos la verdad, nos mostramos abiertos y sentirnos cada vez más amor entre nosotros”, señaló .

View this post on Instagram

Amor 💖

A post shared by Patricia Lopez-Menadier (@patricialopezmenadier) on

La artista aseguró que su matrimonio fue un compromiso que tomaron íntima y privadamente. “Una unión espiritual, que es la importante. Haremos la ceremonia y celebraciones correspondientes al terminar nuestro proceso. Pero para nosotros ya somos un matrimonio y estamos felices”, añadió.

Paty se dio cuenta que su marido era el hombre de su vida, luego de participar en un programa similar en 2017, en la sede de Isha en Manzanillo, México. “A él le encantó, me dijo que era lo que estaba buscando hace años. Ahí me cuenta que encontré al hombre que buscaba, un compañero que cultivara una disciplina espiritual”, explicó. “Hoy es mi esposo y me llena de emoción tener una relación tan honesta con el hombre más bello del mundo”, dijo.

Para poder participar en el programa que dura seis meses, la actriz afirmó que tuvo dejar varios asuntos finiquitados en Santiago y que incluso tuvo que posponer “invitaciones de áreas dramáticas” para unirse a sus proyectos. “Hace un par de años esa decisión no hubiera sido posible porque me sentía muy apegada a mi trabajo, mi carrera y mi lugar en TV”, reconoció.

En el centro López comparte habitación con cuatro compañeros y se levanta a las 06:00 horas para ejercitarse corriendo o hacer Yoga. Durante la mañana meditan cerca de cinco horas con los ojos cerrados y tras un breve almuerzo de 30 minutos, regresan a dicha actividad. Su día finaliza “con reuniones de estudiantes y maestros donde compartimos cómo va nuestro proceso”.

En la noches también pueden ver películas, documentales y conferencias de su maestra, y una vez al mes celebran el cumpleaños de todos los participantes con una fiesta con baile y torta, “lo único dulce que comemos al mes”.

“No estamos en un claustro, acá no nos obligan a nada, no hay nada extremo ni fanático. Tenemos acceso a internet y sabemos todas las noticias, pero tratamos de usar el celular lo justo y necesario”, agregó.

Patricia está terminando el proceso y espera poder graduarse como facilitadora del sistema Isha. “Llegaré a Chile a implementar el Programa de Meditación Educativa que enseña a los niños a amarse a sí mismos, reconocer sus emociones y aprender a sentirlas y expresarlas sanamente. Los niños del Sename y de la Junji con mi prioridad. Espero que las autoridades nos abran las puertas”, finalizó.

View this post on Instagram

En el encuentro con mi corazón. Gracias @ishajudd !

A post shared by Patricia Lopez-Menadier (@patricialopezmenadier) on