Cuando Javiera Suárez pensaba que la batalla contra el cáncer que la aqueja desde hace dos años estaba llegando a su fin, recibió un balde de agua fría que la hizo volver a una realidad muy compleja.

A mediados de marzo, la periodista descubrió que el melanoma que afectaba uno de sus pechos, huesos e hígado había regresado en la pleura pulmonar (membrana que recubre los pulmones). Pero no sólo eso, sino que además los médicos descubrieron otros dos pequeños tumores en el hígado.

“Es distinto, no es peor porque antes estaba en juego la vida de Pedrito, pero ahora estoy más cansada. Pensé que ya estaba de salida, ¡y aquí estoy de vuelta! No sé, pero está grande, no se puede irradiar, odio el cáncer, igual le agradezco un montón de cosas, pero no pensé que iba a regresar tan rápido, capaz que nunca se fue, y ahora ni siquiera puedo planificar algo a futuro con mi marido”, señaló en una sentida entrevista con la revista Caras.

Estas noticias hicieron que la comunicadora tuviese que volver a ser operada y retomar las sesiones de radioterapia y un nuevo tratamiento de inmunoterapia. Sin embargo, siguió trabajando y cultivando su carrera.

Paralelamente Javiera se convirtió en rostro de una multitienda y además se preparó para el lanzamiento de su primer libro de recetas saludables Liveat, el cual saldrá a la venta el 8 de mayo.

“El cáncer me enseñó que nadie es dueño de su vida, que no la puedes dar por garantizada. Y pensar que mientras te estás muriendo otros viven alegando, amargados, no pueden ser tan egoístas ¡Están vivos! agradezcan, sonríanle al de al lado, mejoren el mundo partiendo por ustedes”, dijo.

Pero a pesar de este adverso panorama, tiene fe que un milagro ocurrirá y la ayudará a derrotar la enfermedad y superar los pronósticos, tal como pasó cuando nació su hijo Pedrito, el primer niño en el mundo nacido luego que la madre fuera sometida a un tratamiento de inmunoterapia durante el embarazo.