Billie Eilish es una artista conocida por luchar contra los estereotipos de género y el body shaming, término que se aplica cuando personas critican el cuerpo de alguien más.

Al respecto, la cantante, quien recientemente estrenó el videoclip de su colaboración con Rosalía, recordó un complejo episodio que vivió durante su adolescencia.

En conversación con Vanity Fair, la intérprete reveló que llegó a tomar píldoras para adelgazar.

“Recuerdo haber tomado unas pastillas que supuestamente me ayudarían a adelgazar, pero solo me hizo orinar en la cama cuando tenía 12 años. Es una locura. Ni siquiera lo puedo creer”, señaló.

A su vez, indicó que se sometió a regímenes alimenticios debido a su baja autoestima y la presión social.

“Hace cinco años en realidad no estaba comiendo. Me estaba muriendo de hambre”, admitió la intérprete.

Desde que comenzó su carrera, Billie Eilish eligió usar ropa holgada y grande para evitar ser sexualizada o conocida por su cuerpo. No obstante, en octubre pasado fue víctima precisamente de eso.

En aquella oportunidad, fue captada por un paparazzi mientras caminaba por la calle usando una polera ajustada y shorts, imagen que se viralizó y dio mucho de qué hablar.

Cientos de personas comentaron la imagen y no fueron pocos los comenzaron a hablar del físico de la artista, apuntando a su figura y a que estaría con un supuesto “sobrepeso”.

La buena noticia es que mientras algunos se fijaban en el cuerpo de la artista, una ola de sus fans se alzaron para defenderla y criticar a quienes se referían a ese tema.

Tras las polémicas fotos, la cantante publicó en Instagram una críptica imagen donde se le ve con una polera semiajustada, la que acompañó con el mensaje: “¿De verdad quieres volver en el tiempo?”.

Además compartió en sus stories una reflexión de la influencer Chizi Duru. “No todo el mundo tiene un trasero gigante a sus espaldas, ¿está bien? Los rollitos son normales. Son normales. Los senos se caen… Especialmente después de amamantar. ¡Instagram no es real!”, sentenció.

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