El presidente del gremio frutícola señaló que entiende que en estos momentos hay que ser "prudentes" con ciertos temas. Relató que con los incendios que han afectado al país hay suelos productivos que tardará al menos 10 años en recuperarse.

Los empresarios frutícolas, agrupados en Fedefruta, calificaron los incendios forestales de este verano 2023 como una catástrofe para el mundo rural, con zonas donde los suelos productivos “se tardarán en recuperar entre 6 y 10 años; y comunas que serán despobladas por la destrucción”.

Jorge Valenzuela, presidente de Fedefruta, afirmó que “hay un tema social y me gustaría escucharlo también por parte del Gobierno, porque yo no lo he escuchado”, comentó. Pidió, en este contexto, que el foco sea “primero apagar los incendios” y una vez que pase la emergencia discutir eventuales nuevas regulaciones a la industria forestal.

Respecto a la actividad frutícola en las comunas afectadas por los siniestros, dijo que por varios factores, entre ellos cortes de caminos, “la gente no puede llegar a las faenas de cosecha. El mismo humo en el ambiente… las personas no pueden ir a trabajar. Cómo uno va a obligar a trabajar en esas condiciones en las que no se puede respirar”.

“Todo el mundo cree que la fruticultura son solo los grandes productores, pero el 85% de los fruticultores somos medianos y pequeños, con gente que vive absolutamente de 10 hectáreas de arándano; y si no cosecha a tiempo o se le quema una parte (…) una fruta con humo no se va a exportar. (…) Es muy duro lo que esta pasando”, comentó Valenzuela.

Hasta 10 años para recuperar suelos productivos

El presidente de Fedefruta indicó que volver a utilizar suelos que se hayan quemado es muy poco probable. “Pierden efectividad natural, pierden toda condición biológica de microorganismo (…) demanda mucho tiempo que puedan volver a ser suelos agrícolas”, explicó.

Son entre seis y diez años perdidos “por lo menos”, agregó.

En zonas de Ñuble y Bío Bío, sostuvo Valenzuela, y en el mundo rural en general, todos los pequeños y medianos productores están vinculados con los grandes, porque le prestan servicios.

“Todo ese mundo rural se ve claramente afectado, y la gente se va. Ya lo vimos en 2017 con los incendios en la región de O’Higgins, cuando la gente se movió, se tuvo que ir y zonas se despoblaron. Entonces hay un tema social y a mí me gustaría escucharlo también por parte del Gobierno, porque yo no lo he escuchado”, sentenció.

El presidente del gremio frutícola señaló que entiende que en estos momentos hay que ser “prudentes” con ciertos temas, pero aseguró que “una vez que se terminan los incendios, a todo el mundo se le olvida estas cosas. No nos olvidemos del mundo rural”.

Regulación a las forestales

En cuanto a una nueva regulación a la industria forestal, Valenzuela remarcó que “hay que ser prudentes” en estos momentos y “primero apagar el incendio”.

“Hoy estamos en una condición de cambio climático. Hemos tenido olas de calor que, de hecho, sabíamos que iban a venir. Hubo muy poca prevención e inversión en todo el aparataje de control de incendios. Si se sabía, por qué no había tres, cuatro aviones, una brigada aérea con los recursos, los equipos, los mecánicos, con todo”, cuestionó.

Por último, dijo que desde 2017 a la fecha la situación con los incendios “ha aumentado”.

“Entonces creo que esto habla de una nueva institucionalidad, un cambio importante, profundo, y cómo vamos a enfrentar el escenario de cambio climático que ya es una realidad. Tenemos mucho que aprender y mucho que invertir”, finalizó.