En apenas cinco horas, y gracias a la rapidez de las redes sociales, un caso de acoso sexual callejero efectuado por un asistente y el mánager de la banda chilena Sonora Palacios fue denunciado y sancionado de inmediato por sus empleadores.

Se trata de una acusación que hizo en Facebook la usuaria Camila Quezada Molina, quien relató una situación de acoso vivida en Santiago por el mánager y un asistente técnico de la banda de cumbia.

“Solo quiero dejar constancia que hoy a las 6:55 am, cuando iba caminando por Av Las Nieves estas dos personas, me siguieron, me tomaron fotos y me denigraron con sus comentarios sexualmente machistas (…) y que no le diera color si no estaba ni tan rica”, publicó en su cuenta personal.

“Cuando les contesté, solo rieron y dijeron que las mujeres éramos muy graves (…). Cuando se dieron cuenta que los estaba grabando, me dejaron tranquila. Espero que no tengas hijas, ni señora”, agregó Quezada, cuyo post fue acompañado de un video y dos fotos que identificaban a los acosadores.

Rápidamente, la Sonora Palacios, encabezada por su líder Marty Palacios, emitió un comunicado con las medidas que tomaron a raíz de dicha denuncia. “Con respecto a la situación de nuestro personal involucrado en acoso callejero, Sonora Palacios lamenta y condena profundamente los actos ocurridos y pedimos las disculpas correspondientes a Camila y a todas las mujeres que son violentadas en Chile”, apuntaron

Luego, agregaron: “Queremos aclarar que las personas que están en los videos y fotos son nuestro asistente y nuestro Manager. El vehículo está a nombre de Marty Palacios, pues está en comodato para el uso del mánager en las actividades propias de su actividad. Por tanto, las acusaciones contra nuestro director están mal informadas”.

A continuación, informaron las medidas contractuales que decidieron tomar como agrupación: “Por tal motivo, anunciamos la desvinculación inmediata de nuestro asistente, por no representar nuestro espíritu. En cuanto al Manager, se procederá de igual manera. Con esto esperamos dar una señal clara, sobre los valores que nos inspiran y nos colocamos en relación de los tiempos que corren sobre la no aceptación del acoso callejero cualquiera sea la índole”.