El actor europeo, considerado por la crítica como un artífice de la ruptura de tabúes sexuales de su época, falleció este jueves en su ciudad natal.

A la edad de 78 años falleció el icónico actor austriaco Helmut Berger, quien ganó fama mundial como uno de los colaboradores recurrentes del cine de Luchino Visconti. El deceso ocurrió este jueves en Salzburgo, su ciudad natal.

Berger fue una de las grandes estrellas del cine europeo en los años 1960 y 1970, y fue considerado en su época como uno de los hombres más atractivos del mundo, según la revista Vogue.

El próximo 29 de mayo, el actor, que se definía abiertamente como bisexual, iba a cumplir 79 años.

Su agente, Helmut Werner, dijo en declaraciones a APA que Berger murió a primera hora del jueves “en paz aunque de forma sorprendente”.

El actor participó, entre otras, en películas como “La caída de los dioses”, “Ludwig”, “El retrato de Dorian Gray”, “Miércoles de ceniza”, “Faceless” y “El Padrino III”.

Berger rodó en los años 1960 y 1970 películas con estrellas de Hollywood como Elisabeth Taylor, Henry Ford, Burt Lancaster o Romy Schneider.

Helmut Berger rompió los tabúes sexuales de su época

Berger, que también figuró como un artífice de la ruptura de tabúes sexuales de esa época, fue descubierto como actor por el mítico director italiano Luchino Visconti, del que fue amante durante años.

A partir de allí, su vida estuvo marcada por grandes éxitos en el cine, seguido por escándalos y depresiones, sobre todo tras la muerte de Visconti en 1976.

En su autobiografía, publicada en 1998, el actor asegura haber tenido relaciones sexuales con decenas de famosos de la época, como Rudolf Nureyev, Britt Ekland, Ursula Andress, Nathalie Delon, Linda Blair, Jerry Hall, Bianca y Mick Jagger.

Después de la muerte de Visconti, que no sólo fue su mentor y amante sino una especie de “padre sustituto”, el actor cayó en una profunda crisis, con un intento de suicido, excesos de alcohol y un estilo de vida decadente.

Berger, que siempre se definió como bisexual, llegó a decir que después de Visconti no podría enamorarse nunca más.

Sin embargo, casi 2 décadas después, en 1994 se casó con la actriz italiana Francesca Guidato, de la que se separó unos 15 años más tarde.

Para muchos críticos, Helmut Berger también logró personificar la ruptura de los tabúes sexuales en el cine europeo, al interpretar personajes narcisistas y bisexuales.

En 2018, con 74 años y tras un amplio recorrido por el cine y la TV, tuvo su debut en el teatro, al actuar en la Volksbühne de Berlín en una obra donde interpretaba a un barón.

Un año más tarde, anunció que debido a su delicado estado de salud, tras sufrir varias neumonías, daba por terminada su carrera como actor.

Su agente, Helmut Werner dijo hoy a la prensa local que Helmut Berger “vivió hasta el final feliz, satisfecho y de buen humor en Salzburgo”.

Y concluyó con una cita del hoy fallecido: “Viví tres vidas. Y eso en cuatro idiomas. No me arrepiento de nada!