En la Fiscalía Regional Oriente asumió este viernes como máximo jefe el persecutor Manuel Guerra, que ya ordenó los primeros cambios en la jefaturas de las distintas unidades.
El fiscal regional que sucedió al persecutor Alberto Ayala, y que se mantendrá en el cargo por los próximos ocho años, indicó a Radio Bío Bío, que confirmó como jefe de alta complejidad al fiscal -que descubrió el mecanismo de financiamiento ilegal de la política, en el Caso Penta- Carlos Gajardo, a quien le manifestó su total “confianza”.
En la instancia Guerra nombró además en la Fiscalía de Las Condes a Lorena Parra, quien obtuvo la condena en el caso por abusos sexuales -contra menores- contra el sacerdote Jhon O´reilly.
Mientras que en las comuna Ñuñoa, designó al persecutor de indaga el caso de “sueldos” en la ANFP, Felipe Sepúlveda, actualmente en juicio contra Marcial Berríos imputado por el crimen del sub-teniente de Carabineros, Daniel Silva.
En Macul – Peñalolén, en tanto, asumirá como jefe Miguel Ángel Orellana.
Manuel Guerra -en su proyecto- tiene contemplado fortalecer la persecución de delitos de robo contra la propiedad que son más intensos en esta zona de la Región Metropolitana, intensificando además la persecución de bandas que se encuentran detrás de este tipo de ilícitos.
El nuevo fiscal regional oriente explicó a Radio Bío Bío, la forma en que se encausarán a futuro los diversos casos.
El persecutor agregó que están revisando la configuración de los distintos grupos de fiscales en la zona oriente y que la otra semana se entregarán detalles de la forma en que abordarán los delitos contra la propiedad.
