Hasta la Contraloría Regional del Bío Bío llegó el consejero Luis Santibáñez para sindicar al seremi de Educación y al alcalde de Talcahuano como responsables por los problemas de construcción del Liceo A-21.
Santibáñez presentó el requerimiento en su calidad de integrante de la comisión de fiscalización del CORE buscando cautelar los recursos públicos invertidos en las obras del recinto.
Su solicitud es gatillada por los graves problemas de construcción que presenta esta estructura y que mantiene los trabajos con el 98% de avance, pero suspendidos por el colapso de los pilares.
Para la autoridad, el Mineduc y la Municipalidad de Talcahuano son los responsables, entidades, según afirmó Santibáñez, aún ni siquiera presentan antecedentes en el órgano contralor.
También deslizó críticas a la forma en que están llevando el tema los “amigos” Sergio Camus y Gastón Saavedra.
Consultado el seremi de Educación Sergio Camus, quien efectivamente trabajó en la Municipalidad de Talcahuano, descartó que esto se esté arreglando “a lo amigo”, y descartó responsabilidades políticas de él o de Saavedra en los problemas de construcción. Insistió en que el tema se trata de aspectos técnicos.
La autoridad educacional sentenció, con sarcasmo, que el proyecto se inició durante el Gobierno de “excelencia” de Piñera, y que en un lapso de 35 días hábiles estarán listos los peritajes y contraperitajes que entreguen luces técnicas de las fallas del gimnasio del A-21.