Los concejales de Puerto Montt lamentaron las declaraciones del alcalde Gervoy Paredes, quien aseguró que algunos de los ediles tenían mala intención al criticar la educación municipal en la comuna, en lugar de reconocer los avances.
Eduardo Matamala, quien preside la instancia, aclaró que la elección de los siete establecimientos fiscalizados fue completamente al azar, recordando que la visita inspectiva fue fruto de un acuerdo.
Anunció además que seguirán las fiscalizaciones, porque sólo a través de ellas se logarán avances en la materia.
Por su parte, Iván Leonhardt, uno de los concejales acusados por el alcalde de desprestigiar la educación pública de la comuna de manera planificada, lamentó la crítica e invitó al jefe comunal a no seguir mirando “hacia atrás”.
Pedro Sandoval, el otro concejal aludido por su pasado como funcionario público, le pidió al alcalde que revise sus equipos de trabajo, ya que en ellos radican sus reales problemas. Además, catalogó las declaraciones de Parades como “una estrategia de la guerra fría”.
Cabe señalar que la cuarta firma de este informe cuestionado por el alcalde fue de la concejala María Elena Barría, quien declinó entregar declaraciones al respecto para evitar posibles problemas con su empleador -el propio jefe comunal de Puerto Montt- al desempeñar ella actualmente funciones profesionales al interior de la Dirección de Educación Municipal.