A diez días de que se materializara el cambio de nombre de la ex avenida “11 de septiembre” por el de “Nueva Providencia”, luego de que así lo resolviera el Concejo Municipal de Providencia, la nueva señalética se ha mantenido en óptimas condiciones, la merma ha sido mínima y la gente se ha ido acostumbrando.

Según reconoció la alcaldesa de Providencia, Josefa Errázuriz, los 27 letreros que fueron reemplazados no han sido dañados hasta ahora por la acción de terceros y, en algunos casos muy puntuales, se ha ordenado la reposición, lo que no ha significado gastos extras para el municipio.

“Se han sacado algunos, pero se han ido reponiendo. No sé exactamente el número, pero sí hemos tenido alguna merma. Pero eso está en el contrato de reposición de señalética y, por lo tanto, no es un costo para la municipalidad”, aclaró la jefa comunal.

CUESTIÓN DE ACOSTUMBRARSE

Consultada por Agencia UPI sobre quejas o reclamos posteriores a la concreción del cambio de nombre de una de las principales avenidas de esa comuna de la Región Metropolitana, Errázuriz dijo que la aprobación de los vecinos sigue siendo mayoritaria.

La jefa comunal dijo que si bien se recibieron reclamos por parte de algunos comerciantes previo a la materialización del cambio de señalética, hasta ahora no ha habido quejas o reclamos de quienes se oponían al rebautizo de la arteria.

“Antes del cambio recibimos algunas cartas de comerciantes que decían que no querían, hubo opiniones y yo las respeto todas, pero la gran mayoría (de cartas) que hemos recibido con posterioridad a la sesión del Concejo han sido aprobatorias”, aseguró.

“Yo personalmente no he recibido cartas con reclamos. No sé si alguno de los grandes directores de la municipalidad las recibieron antes de que yo las viera, pero yo no he recibido cartas con quejas”, dijo entre risas.

“El otro día un funcionario dijo por error (al antiguo nombre de la avenida). Bueno, es un tema de costumbre. Pero tiene un significado mucho mayor. Los detractores que hay o las personas que dijeron que no, son de verdad, porque lo he vivido en la calles, y en mis correos, los menos”, confesó.

En el municipio comentaron que tras la aprobación del concejo de restituir a la avenida su nombre original de “Nueva Providencia”, se debió agilizar el reemplazo de la señalética, porque se detectó que varios letreros que llevaban el de “11 de septiembre” comenzaron a desaparecer.

“Se robaron varias antes de que las cambiáramos, por eso hubo que apurar el reemplazo con el nuevo nombre. Algún nostálgico que quiso tener un recuerdo”, indicaron fuentes del municipio.