La Contraloría General de la República emitió un dictamen en respuesta a la presentación hecha por el diputado Joaquín Godoy y el abogado Mario Zumelzu, en relación a la legalidad del proyecto de construcción de un mall en el sector del muelle Barón en Valparaíso.

Si bien el ente fiscalizador no cuestionó la legalidad de los contratos de concesión, sí realizó una serie de precisiones en torno al impacto vial que la edificación de dicha obra representará para el flujo vehicular de la ciudad puerto.

En este sentido, el documento firmado por el contralor Ramiro Mendoza, señala que aunque la Avenida Errázuriz “no aparece clasificada en los instrumentos de planificación territorial vigentes, tal vía debe clasificarse (según la Ordenanza General de Urbanismo y Construcción) conforme al ancho mínimo de sus calzadas pavimentadas y la distancia entre sus líneas oficiales”

Esto implica según el órgano contralor que “no resulta suficiente que el predio (en este caso el Mall Barón) enfrente un nudo vial si éste no cumple con las condiciones exigidas para ser catalogado al menos como vía troncal”, categoría que no cumple la Avenida Errázuriz.

Al respecto, la concejal de Valparaíso, Paula Quintana, destacó lo señalado en el dictamen 33426 de la Contraloría General de la República, y afirmó que el proyecto del Mall Barón no cumple con la normativa urbanística vigente.

La Contraloría también puntualizó que es necesario fijar “nuevas normas urbanísiticas” en relación a la caducidad de la utilidad pública del terreno afecto que fue expropiado para levantar el Mall Plaza Barón.

Finalmente Quintana, junto a las organizaciones sociales que se oponen al proyecto del mall señalaron que revisarán a fondo lo resuelto por la Contraloría y esperan que esto sea un paso para detener la construcción de esta obra.