El entrenador de Peñarol, Jorge da Silva, reiteró sus críticas contra el árbitro brasileño Leandro Vuaden, al acusarlo de tener una “intención tendenciosa” contra su equipo, tras la derrota 1-2 ante Universidad de Chile, que lo dejó sin opciones de avanzar en Copa Libertadores.
El técnico charrúa se había molestado en la rueda de prensa posterior por el penal que luego perdería el capitán azul José Rojas y por algunas amonestaciones que condicionaron el trámite del juego. Fueron tantos sus reclamos que, cabe recordar, fue expulsado a los 62 minutos.
“Desde un principio me pareció que tenía una intención tendenciosa a ser localista y hubo un par de jugadas que me lo confirmaron: el penal (sobre Eugenio Mena), que para mí no fue y nos condicionó apenas empezó el partido (minuto 8) con la amarilla a Freitas”, aseguró a su llegada al Aeropuerto de Montevideo.
Da Silva agregó que “después exploté cuando no cobró dos faltas a ‘Maxi’ (Pérez) y a Mora dentro del área de ellos (…) La bronca (sic) es porque el equipo se brindó al máximo, fue a buscar el partido aún jugando de visitantes y estuvimos a punto de ganarlo, aunque nos quedamos con las manos vacías, lamentablemente”.
Por último, el ‘Polilla’ reconoció que “estoy con tristeza y bronca porque el equipo quedó sin posibilidades de llegar a las instancias decisivas de la Copa. Ahora la prioridad es el Campeonato Uruguayo”.
Al estar ya eliminado, Peñarol jugará con un equipo alternativo las dos últimas jornadas del Grupo 8 de Copa Libertadores: ante Atlético Nacional el 10 de abril en Medellín, Colombia, y el 19 del mismo mes contra Godoy Cruz de Mendoza (Argentina) en Montevideo.