La Alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, exhortó el viernes a las autoridades egipcias a efectuar investigaciones “transparentes e imparciales” sobre las reciente violencias, estimando que en Egipto “un cambio está en curso, como ocurrió en Túnez”.
“Los gobiernos deben escuchar a su población y poner en práctica sus obligaciones sobre derechos humanos”, explicó la comisionada en una conferencia de prensa.
“Los regímenes que privan a su población de sus derechos fundamentales y se apoyan en un aparato de seguridad implacable para imponer su voluntad, a largo plazo están condenados a caer”, insistió.
“El cambio está en curso en Egipto, como llegó en Túnez, pero la violencia y el derramamiento de sangre deben detenerse” dijo Navi Pillay.
La comisionada de la ONU se refirió en particular a los enfrentamientos esta semana entre opositores y partidarios del régimen de Hosni Mubarak.
“El miércoles hubo actos de violencia y hemos asistido a escenas conmovedoras de grupos oponiéndose con cócteles Molotov” y piedras, explicó Pillay.
“Una vez más, la ausencia de la policía fue notable y el ejército fracasó en separar a los dos grupos, con consecuencias trágicas”, prosiguió.
“Debe haber investigaciones para determinar si esas violencias fueron planificadas, y si es el caso, quién las planificó”, recalcó al tiempo de insistir: “esas investigaciones deben ser hechas de manera transparente e imparcial”.