Los asiáticos y los africanos corren el riesgo de beneficiarse menos de la investigación con células madre embrionarias que las personas de origen europeo debido a una falta de diversidad en las células almacenadas, advirtieron el miércoles investigadores estadounidenses.
Un equipo de investigadores de la universidad de Michigan descubrió que las líneas de células embrionarias provenían en su gran mayoría de personas de origen europeo. Según el equipo, la falta de diversidad podría tener un impacto sobre los estudios relacionados a enfermedades que afectan sobre todo a personas de orígenes diferentes.
“Es crucial que estén disponibles líneas diferentes para la investigación para garantizar que todos los pacientes se beneficien de los resultados”, indicó Sean Morrison, especialista en células madre de la universidad de Michigan.
El estudio, publicado el miércoles en el New England Journal of Medicine, se centró en 47 líneas de células madre embrionarias, de unas 700 actualmente usadas en investigación.