El presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, anunció este lunes la derogación de un decreto que suprimió hace una semana las libertades civiles, previo al inicio formal de un diálogo que busca superar la crisis provocada por el golpe de Estado de hace 100 días.
Fuente: Agencia AFP.
“Yo quiero darle la noticia al mundo entero y que más grato que estando presente esta ilustre dama para decirles que hemos derogado en Consejo de Ministros el decreto, todo el decreto (…) completamente”, dijo Micheletti, en rueda de prensa con la congresista cubano-estaounidense Ileana Ros-Lehtinen.
El decreto restringió las libertades de movimiento, reunión y prensa, y bajo su amparo Micheletti sacó del aire a Radio Globo y al Canal 36, afines al presidente Manuel Zelaya, derrocado el 28 de junio y quien se refugia en la embajada de Brasil desde hace dos semanas.
Más temprano este lunes, Micheletti había dicho que su decisión de restablecer las libertades se debía a que el país estaba “volviendo a la tranquilidad”, a la demanda de varios sectores del país y al rechazo que provocó en la comunidad internacional.
La decisión se produce poco antes de la instalación de una mesa de negociación entre representantes de Zelaya y de Micheletti, que desarrollará una agenda basada en el plan del presidente costarricense Óscar Arias, cuyo punto medular es la restitución del depuesto mandatario.
Pero para abrir la negociación esta semana -fecha aún no precisada-, Zelaya había pedido al gobierno de facto que levantara el estado de excepción y el cerco militar a la embajada de Brasil.
El diálogo será acompañado por unos cinco cancilleres, tres vicecancilleres y el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, que llegarán el miércoles con la esperanza de que esta vez se resuelva la crisis política, tras varios intentos fallidos.