Hasta el Juzgado de Garantía de Concepción llegó el director regional de Conaf, Jorge Morales, para interponer una querella por robo de madera en bienes nacionales de uso público, en este caso, desde la reserva nacional Nonguén.

La acción judicial está dirigida hacia dos personas individualizadas y contra otros que resulten responsables, de un delito que parece arraigado entre quienes venden leña, sin sopesar el daño ambiental que provocan ni el ilícito en que se ven envueltos.

La semana pasada la PDI detuvo a un hombre, pero no sería el principal implicado, sino quien en ese momento dejó abandonada la camioneta llena con trozos de 6 robles añosos.

“No se puede sacar madera nativa de una reserva nacional. Es una pérdida patrimonial importante”, comentó el director de Conaf.

Morales recordó que la reserva de Nonguén se transformará en un Parque Nacional a partir del próximo año, debido al enorme valor de las especies que contiene, bosque caducifolio, el que pierde su follaje, transformándose en el primero periurbano del país.

Por su parte, el administrador de la reserva nacional Nonguén, Jorge Quintana, lleva registrado 15 robos, desde enero a la fecha, por parte de personas que destruyen los cercos para robar la madera.

El robo de madera en un bien nacional de uso público, en todo caso, es un delito que, en caso de hallar responsables, reportaría penas sin privación de libertad, aunque impondría algún tipo de pena sustitutiva y sería una señal clara para el resto de quienes se dedican a esta actividad ilícita.