Tras la reforma educativa en Francia, comenzó la enseñanza de una segunda lengua extranjera además del inglés. Académicos y estudiantes estuvieron de acuerdo en escoger al español como el idioma que quieren aprender, por lo que tendrán que sumar 1.000 profesores a sus aulas.

Las clases acaban de comenzar, lo que urge a los institutos franceses sumar 1.000 profesores a los 20 mil existentes. Por esta razón, se han comenzado a realizar contrataciones por decenas.

La reforma impulsada por la ministra de educación francés Najat Vallaud-Belkacem, busca incentivar el aprendizaje de lenguas vivas por encima de las muertas. Dando menos horas de latín y griego en favor del inglés o el español.

A partir de este curso que apenas comienza. los alumnos del equivalente al español primero de secundaria tienen ya 2,5 horas semanales de una segunda lengua extranjera. La reforma pretende aumentar en 54 las horas de enseñanza de una segunda lengua a partir de los 11 años,  según información de El País.

Cifras oficiales indicaron que la preferencia por el español se ha triplicado en la última década, alcanzando los 2,7 millones de estudiantes, solo superada por el inglés (5 millones).

 

Para optar por un cargo, se requiere haber acabado un máster y enviar el currículo al rectorado del instituto en el que aspira trabajar.

Los sueldos no son altos. Según Ahmed Haderbache, presidente de la Asociación Francesa de Profesores de Español, un profesor gana una media de 1.500 euros netos al mes, muy cerca del salario mínimo en Francia (1.466 euros), que dependiendo de la cantidad de años en la docencia podría superar los 2.000 euros.

Para los estudiante, la lengua de Cervantes apunta como favorita al tener una buena imagen de los españoles y considerar la cercanía con latinoamérica.