Si eres de aquellas personas que escribe de manera impulsiva en las redes sociales, o que comparte todo lo que lee sin comprobar si el texto es verídico o no, lo siguiente te podría resultar de mucha utilidad.
Bill Duane, ejecutivo de Google y profesor de meditación que supervisa el bienestar de la compañía y el desempeño de los programas de aprendizaje, dio su receta sobre lo que se debe hacer antes de difundir cualquier contenido.
Lo primero que aconseja es tomarse un tiempo antes de iniciar sesión en el computador o celular, para luego evaluar las intenciones que tenemos para conectarnos a Internet.
Tal como recoge el periódico norteamericano The New York Times, es en este momento en que Duane recomienda realizarse tres preguntas respecto a la publicación que tienes pensado hacer:
1- ¿Es verdadera? Hoy en día es común ver numerosas “fake news” (“noticias falsas”, en español), las que pueden hacer que pierdas credibilidad. Prueba de esto es lo que ocurrió durante los incendios que afectaron a la zona centro-sur de nuestro país, cuando comenzaron a circular una serie de rumores en las redes sociales.
2- ¿Es amable? Ten en cuenta que algunas publicaciones transmiten contenido negativo, lo que tiende a ofrecer una mala imagen de ti frente a los demás. Esto puede causar polémica o rivalidades en Internet.
3- ¿Es necesaria? Esta pregunta es sumamente útil ya que te servirá para determinar si realmente tus amigos deben ver lo que piensas compartir.
Sólo en el caso de que la respuesta ante estas tres preguntas sea sí, entonces vale la pena hacer la publicación. De lo contrario, lo mejor es que compartas el mensaje de manera interna junto con quienes creas pertinente.
Según un estudio dado a conocer por Gfk Adimark en enero de 2016, el 39% de los chilenos no tiene pudor en utilizar el móvil para revisar mensajes de Facebook, Whatsapp o SMS durante una misa o ceremonia funeral, y “sólo” el 22% lo usa durante una cita médica o psicológica.
Otro dato llamativo de la muestra es que casi el 90% usa el celular mientras está en la cama antes de irse a dormir, mientras que el 76% lo hace antes de salir de la cama en la mañana.
