Ayer, a través de un texto publicado en el diario español El País, Carolina López, la viuda de Roberto Bolaño, rompió un silencio de más de 10 años con los medios de comunicación para responder las declaraciones del crítico literario español Ignacio Echevarría y del editor de Anagrama Jorge Herralde. El motivo: desmentir una relación amorosa entre el autor y Carmen Pérez de Vega en la última etapa de su vida, y explicar por qué le quitó los derechos de publicación, en nombre del legado de Bolaño, al sello de Herralde.

El texto de López no dejó indiferente a nadie: recorrió Hispanoamérica y fue reproducido en diversos canales. Hoy, un día después de la polémica, a través del mismo diario El País, Echevarría publica una columna donde recoge el guante y le responde a López. “Me veo en la penosa obligación de desmentir, por la parte que me toca, algunas de las falsedades que Carolina López vuelca en un artículo publicado ayer por este periódico bajo el título La verdad sobre Bolaño“, escribió el crítico.

Roberto Bolaño
Roberto Bolaño

Primero, Echevarría se refirió al vínculo de Bolaño con Pérez de Vega: “Me he limitado a dejar constancia de la relación de Roberto Bolaño con Carmen Pérez de Vega, y lo he hecho movido por el escándalo que me producía la insistencia de Carolina en negar esa relación y la prepotente manera en que ha acosado a Carmen Pérez“, cuenta, para luego afirmar: “me sorprende que en el mismo artículo en que ella niega esa relación y aparece felizmente abrazada a Roberto se remita a un artículo de La Vanguardia en el que se publica una foto bastante más tardía, correspondiente al último cumpleaños de Roberto Bolaño, en la que éste aparece felizmente abrazado a Carmen Pérez de Vega, la mujer que pocas semanas después lo llevaría al hospital en que murió”.

Sobre su vínculo laboral con López, dijo: “Los libros póstumos de Roberto Bolaño de los que me ocupé fueron publicados por iniciativa mía, como ella misma reconocía en una entrevista a la que alude en su artículo, publicada en La Vanguardia a comienzos de 2011. Mi trabajo, por cierto, lo realicé venciendo el escepticismo que Carolina López sentía respecto al interés que pudieran suscitar esos libros”.

Nicanor Parra, Roberto Bolaño e Ignacio Echevarria | poetasdelfindelmundo.com/
Nicanor Parra, Roberto Bolaño e Ignacio Echevarria | poetasdelfindelmundo.com/

También negó haber difundido sin autorización un manuscrito inédito de El secreto del mal (“¿Controla López mi correspondencia? Sin incumplir ningún acuerdo ni expreso ni tácito, me limité a consultar con Carmen Pérez el contenido de ese libro, para averiguar si había piezas de interés que se me escapaban“). Y haberse declarado albacea de Bolaño (“Es falso lo que a este respecto dice Carolina López. En el pasaje de la entrevista que me hicieron en Ecuador y que ella cita para demostrarlo me limito a explicar al periodista que esa función sólo me correspondía de palabra, no legalmente, y que fue Carolina quien, como es sabido, me atribuyó, en nombre de Roberto Bolaño, el papel de asesor“).

Pero Echevarría no ha sido el único que se ha referido en malos términos a Carolina López. También hoy, el sitio web Paniko publica una entrevista a la hermana del autor de Los detectives salvajes, María Salomé. “No tenemos ninguna relación (con Carolina). Cuando Roberto empezó a publicar sus novelas por Anagrama, él le enviaba mensualmente unos 200 euros actuales a mi mamá; pero cuando murió, Carolina le dijo que no le iba a pasar más esa cantidad, que ya no había ningún vínculo y que se olvidara de contar con ese dinero“, cuenta dese España.

Roberto le había dicho a mi madre que todas las ganancias posteriores de Estrella distante (publicada por primera vez en Anagrama en 1996) serían para ella. Pero eso no pasó, ya que no hizo un documento legal, y después de su muerte Carolina no lo permitió”, apuntó la hermana, y puntualiza: “Una vez Carolina la llamó para demandarla. Fue muy desagradable. Le dijo a mi mamá que la iba a demandar por haber cedido una foto de Roberto a un diario. Carolina le remarcó a mi mamá que ella era la dueña de todo lo que tenía que ver con Roberto”