Estamos a poco más de un mes de la Navidad, festividad en la que los niños de todo el mundo le escriben ansiosamente al Viejo Pascuero para contarles lo bien que se han portado y así pedir sus regalos.
Enviarle una carta al Viejo Pascuero es una de las tradiciones que más cariño le tenemos al momento de recordar nuestras infancias. Una bicicleta, un auto a control remoto o un videojuego, de todo tipo son los pedidos de los más pequeños.
Sin embargo en algunas oportunidades las exigencias escapan de lo habitual. Es por esta razón que el sitio Reddit realizó un listado con los pedidos más insólitos del año pasado que se le hicieron a los Viejos Pascueros y a sus colaboradores en los centros comerciales de Estados Unidos.
Revísalos a continuación.
1- Un nuevo hígado
“Trabajé como elfo cuando tenía 15 años. De pronto llegó un niño que quería un nuevo hígado. Aparentemente él estaba sano, pues dijo que sólo quería uno para jugar”
2- “Trabajé como elfo, aquí va mi top 3″
-Un niño pidió un unicornio que defecara arcoiris
-Un cerdo como taza de té
-La fábrica de Santa: tenía 6 años y ya entendía el juego
Lainformacion.com | Twitter
3- Una máquina de fax
“Varios niños me pidieron una máquina de fax. Era el año 1989. Estoy casi seguro de que ellos nisiquiera sabían qué era eso. Yo no tenía idea al menos. Pensé que era una nueva versión de un triciclo, o algo por el estilo”
4- Condones
“Un colega acostumbraba a disfrazarse de Santa. Una vez me contó que un niño, de unos 8 o 9 años, le pidió una caja de condones, ya que su mamá no quería comprárselos”
5- Bendición a un bebé
“Una vez estaba trabajando como Santa y llegó una pareja de la India, quienes me pidieron que bendijera a su nuevo bebé. Pensé que se habían tomado mi disfraz demasiado enserio. Eso fue incómodo. También recuerdo que en 1998 o 1999 debí aprenderme a cada uno de los pokemones”
IG: niTanTukky | Twitter
6- Reverencia
“Mi tío trabajó como Santa, y me contó que una vez llegó una pequeña y aterradora niña quién le pidió que todos se arrodillaran ante ella. Básicamente una niña muy normal…”
7- Regreso de su padre
“Trabajé como Santa Claus en fiestas y una vez me encontraba caminando disfrazado por un vecindario. Lo más duro que me tocó fue cuando se me acercó una pequeña que quería de regalo que su padre volviera de prisión. Eso fue incómodo, y tuve que decirle que algunos presentes demoran incluso años en llegar, pero son los que más valen la pena cuando llegan. Le aseguré que su papá la extrañaba y la amaba. Es mucho más fácil cuando me piden una Barbie”.
8- Extrañas preguntas
“Trabajé como Santa hace un par de años. Tenía a una pequeña niñita que me atacó con varias preguntas. Desde qué tan largo era mi trineo, hasta como se reproducían los elfos”
