El Gobierno le restó importancia al vínculo familiar del candidato a fiscal nacional, Jorge Abbott, y el ex canciller y quien encabeza el comité de crisis de Penta, Alfredo Moreno.

Esta situación podría generar conflictos de intereses para el futuro jefe del Ministerio Público, ya que esta entidad es la que encabeza las indagaciones que vincula a la empresa precisamente con delitos tributarios por la emisión de boletas ideológicamente falsas por parte de políticos, entre ellos parlamentarios.

El vocero de Gobierno, Marcelo Díaz, dijo que este es un antecedente conocido, por lo que le restó importancia a este antecedente al momento que los senadores decidan si aprueban o no el nombre propuesto por la presidenta Michelle Bachelet.

Mientras que el ex secretario de Estado de la administración Piñera, Alfredo Moreno, reconoció la existencia del vínculo familiar. Sin embargo destacó las actitudes de su primo para desempeñarse en el cargo de jefe del Ministerio Público.

El senador y presidente de la DC, Jorge Pizarro, sostuvo que nadie escoge a sus parientes.

Por su parte, el senador y presidente del MAS, Alejandro Navarro, cuestionó al Ejecutivo por sostener ante la elección de la fiscal nacional un diálogo con mayor frecuencia con la oposición que con La Nueva Mayoría y además dijo que el parentesco podría implicar conflictos de intereses.

Tras el comité político, los presidentes de los partidos entendieron que el Ejecutivo solicitó el apoyo. Hay una preocupación por quienes se inhabilitarán o se abstendrán de la votación, aunque está claro en el Ejecutivo que el nombre de Abbott también genera consenso en la oposición.